Uno de los problemas de salud más graves existentes en la poblacion del Tolima es la hipertensión arterial, derivada de los malos hábitos de vida, entre ellos la alimentación rica en grasas y carbohidratos, que conducen a obesidad y sobrepeso; en efecto, el Departamento ocupa los primeros lugares en hipertensión y diabetes, tanto en morbilidad como en mortalidad, y el primero en obesidad. La mayoría de los hipertensos, según recientes encuestas elaboradas, no acude a los controles médicos ni toma los medicamentos recetados; la consecuencia son los accidentes cerebrovasculares que se traducen en hemiplejia y, en muchas ocasiones, en muerte.

Como la hipertensión no es privativa del Tolima ni de Colombia, ni de los países en desarrollo, sino también de los países ricos; por ello, las investigaciones en este campo son bienvenidas por la comunidad médica.

Se sabe ahora que el té negro puede reducir el riesgo de desarrollar hipertensión arterial y que tomar tres tazas diarias reduce la presión arterial sistólica y diastólica entre dos y tres mm Hg, de acuerdo con investigadores de la Universidad de Western, Australia. El té negro es rico en unas sustancias llamadas polifenoles protectoras de la capa interna de las arterias, el endotelio; tres tazas de té que contienen aproximadamente 400 mg/día de polifenoles reducen la presión arterial sistólica y diastólica entre dos y tres mm Hg, de acuerdo con los investigadores. Es necesario recordar que la presión sanguínea se mide como la fuerza de la sangre que el corazón, como una bomba, ejerce sobre las paredes de las arterias en el cuerpo. Cuando esta presión es superior a la normal (120/80 mm Hg), las personas corren el riesgo de un ataque al corazón, insuficiencia cardíaca congestiva, insuficiencia renal y aneurismas en las arterias y el cerebro.

“Una gran proporción de población en general tiene la presión arterial dentro de rangos cercanos a la hipertensión o francamente en hipertensión”, afirma el Dr. Jonathan Hodgson, director de la investigación; ésta se llevó a cabo en 95 hombres y mujeres que tomaban té a diario; los participantes estaban en las edades de 35 a 75 años y tenían una presión arterial sistólica (la mínima) entre 115 y 150 mm Hg. Un grupo recibió tres tazas de té por día para tomar durante seis meses, mientras que la otra mitad del grupo recibió un placebo consistente en una bebida similar al té en aspecto y sabor, inclusive con un contenido de cafeína; el té que tomaron fue el de su preferencia, sin especificar marca comercial. A finales de los seis meses, quienes tomaron té negro mostraron una reducción en su presión arterial. La pregunta es: ¿Por qué tomar té negro baja la presión sanguínea de una persona? Los médicos a cargo del estudio creen que es debido a su acción benéfica sobre las paredes de las arterias.  

El descubrimiento significa que el tomar té por parte de una poblacion reduce en un 10 por ciento la presencia de hipertensión y una reducción de las enfermedades cardiovasculares. Los hipertensos del Tolima, ya que no cambian sus hábitos alimenticios, podrían al menos convertirse en tomadores de té; se ahorraría, por parte de los servicios de salud, trabajo y dinero.