Esta semana la Sociedad Colombiana de Cirugía Ortopédica y Traumatología ha enviado una carta abierta al Ministro de Salud, Ingeniero Civil, Gaviria en la cual sobresalen los siguientes aspectos: La Sociedad considera que la actual reforma no modifica el sistema de salud como fue anunciado por el señor Presidente de la República y por el contrario fortalece aún más la figura de la intermediación como actor principal de nuestro sistema de salud y seguridad social, con lo cual se continuaría y profundizaría aún más la crisis existente.
Las actuales EPS continuarán a través de la figura de “gestoras de salud” y están lejos de desaparecer; por el contrario podrán continuar fortaleciendo su posición y además podrán obtener recursos adicionales por las diversas oportunidades y ventajas que les da el nuevo modelo.
La crisis actual del sistema de salud, no es causada por los médicos colombianos. Se debería analizar a fondo todas las irregularidades existentes en el manejo de los recursos, que han llevado al descalabro actual del sistema, incluyendo la financiación de campañas políticas por parte de las EPS. La reforma fue aprobada en plenaria del Senado de la República sin darse la adecuada discusión y análisis de sus puntos y artículos, que en su totalidad revisten una especial trascendencia.
Si bien debe analizar profundamente el modelo de educación actual y de formación del talento humano en salud, y en especial lo relacionado a la formación de médicos generales y de médicos especialistas, rechazamos profundamente la propuesta del Ministerio de Salud en torno a generar la figura mediante la cual los hospitales podrán ofrecer títulos de especialistas de postgrado.
La Sociedad rechaza vehemente las afirmaciones del señor Ministro de Salud según las cuales se refiere a los médicos colombianos con estudios de especialidad médico quirúrgica como “Cartel de los especialistas” y así mismo las del Senador Benedetti en torno a la existencia de “Mafias médicas”. La Sociedad de Traumatología y Ortopedia exhorta a la Academia Nacional de Medicina, a las demás organizaciones miembros de la Gran Junta Médica Colombiana, a todas las demás Sociedades Científicas y a las Asociaciones de pacientes a pronunciarse y a que apoyen las actividades que conduzcan a expresarle al Congreso, al Ministro y al Presidente su rechazo a la actual reforma.
Los pronunciamientos anteriores de parte de una sociedad médica son compartidos por los trabajadores de la salud y la opinión publica; sin embargo estos no son tenidos en cuenta por el poder ejecutivo y el poder legislativo. Sus objetivos son diferentes. La salud desde la Ley 100 es un negocio lucrativo. Aquí no se trata de una reforma para tener un sistema de salud como el de otros países, sin intermediarios financieros. Se trata de una reforma para mantener el actual estado de cosas.
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