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EL NUEVO DÍA: En un primer momento, ¿a qué se debe su visita al Tolima? Estuvo en un foro en la Universidad del Tolima.
Rodrigo Londoño Echeverri: Sí, mi visita se enmarca en una invitación que me hicieron en la Universidad del Tolima, en un foro sobre el tema de derechos humanos, y enmarcado también en el proceso de Paz. Hay gente con inquietudes de saber cómo van las cosas, cómo ha evolucionado la implementación del acuerdo, retrospectivas y qué opiniones tenemos. Fue un intercambio interesante, hubo una buena cantidad de personas en el foro.
E.N.D.: A estas alturas y sobre todo en la coyuntura nacional por el proceso de paz con el ELN, el debate sigue ‘andando’ en un panorama político bastante turbulento. Como actor natural de los acuerdos de paz con las Farc-EP, ¿cómo ve el proceso con el ELN y en qué debería de hacer énfasis el Gobierno?
R.L.E.: Primero que todo, y aprovecho la pregunta para decirle, a nosotros nos decían: ‘ustedes van a estar vigentes dos años, y eso ya nadie se acordará de los acuerdos”. Estamos a siete años y hoy está más vigente que nunca, y mucho más en el marco de estas posibilidades de acuerdo con el ELN y otros grupos.
Porque en buena medida los acuerdos que puedan llegar con muchos otros grupos y con el ELN en especial, va a depender mucho de que se implemente lo nuestro, porque si no se implementa lo nuestro, será un punto de referencia para que otros digan: ‘Si no les han cumplido a ellos, muchos menos nos van a cumplir a nosotros’.
Ahora, nosotros vemos con optimismo el tema. Toda negociación tiene altibajos, siempre se ‘tensa la cuerda’, porque al fin y al cabo la negociación depende mucho de la formación de fuerzas, y mucho más en una negociación de paz que se enmarca dentro de un contexto político y sus dinámicas.
Lo importante es que se mantenga el diálogo y que se busque avanzar, que es lo que uno está viendo. Por ejemplo, recibí la noticia que quizá pase un poco desapercibida y es que llegaron a un acuerdo de seis meses del cese al fuego bilateral, lo que es muy buena noticia.
Uno quisiera que el cese al fuego hubiera sido definitivo, pero probando se comienza. Nosotros comenzamos con ceses bilaterales, y en buena medida eso generó un muy buen ambiente para llegar a lo que llegamos. Eso es saludable y lo llena de optimismo.
E.N.D.: Con la coyuntura nacional, uno espera ver grandes cambios en el primer gobierno de izquierda del país. Como actor del partido Comunes, ¿qué lectura le ha dejado la gobernanza de Gustavo Petro?
R.L.E.: Nosotros apoyamos la candidatura de Petro, estuvimos al lado del Pacto Histórico y ahora formamos parte. Muchas más allá, a nosotros nos convenció porque, además, a nosotros siempre nos convenció la práctica política de él, un hombre consecuente y comprometido con la paz y la justicia sociales.
En ese sentido, hemos creído. Petro recibió una finca abandonada, acabada, sin alambrados, sin nada. Y tiene que comenzar a levantarla, hay que establecer las cercas, hay que establecer desagües, hay que arar y abonar la tierra, hay que organizar las aguas, hay que sembrar.
Eso es un proceso, no se le puede pedir cosecha a los tres meses. Y claro, la situación que vive el país es de angustia en todo sentido, y entonces hay desespero de la gente. Eso lo aprovechan los de la ultraderecha, los que son enemigos de los cambios, para generar un ambiente hostil hacia Petro.
Tenemos confianza y ya comienzan a sentirse las cosechas. Le bajaron el salario a los empleados públicos en el 14 %, ya algunas ayudas les está llegando a la gente, ya algunos productos y alimentos comenzaron a bajar sus precios. Acuérdese que inició el gobierno de Petro y el dólar comenzó a subir, y todo el día era noticia. Ahora todos los días está bajando el dólar y ya nadie se acuerda. Ya comienza a verse la luz al final del túnel.
Algo en lo que soñábamos los firmantes, la tierra. Ya dieron las primeras 1400 hectáreas para 140 familias en la zona de Acacías, Meta. Hay una ruta, hay un plan para comenzar a hacer trabajos con los distintos colectivos de firmantes. Los enemigos de los cambios no están quietos, y por eso es importante estar ‘en la jugada’ y apoyando al presidente Petro.
E.N.D.: Así las cosas, se entiende entonces que ustedes han estado pendientes del trámite de las reformas sociales, ¿cómo han visto eso desde Comunes?
R.L.E.: Con optimismo y convencidos. Este es un proceso de cambios que se están concertando con los mismos enemigos de las reformas, una ironía. Con la reforma tributaria, Petro se puso la meta de $50 billones y en últimas negoció una reforma de más de $20 billones, que es la esperanza en función de las medidas que se van a tomar, ahí está la plata para eso.
La reforma política la ‘manosearon’ tanto que la hundieron. Ahora está la reforma laboral para dignificar el trabajo, y los enemigos están diciendo que se va a acabar el trabajo. Lo remontan a uno a la época de la esclavitud, cuando los esclavistas le preguntaban a quienes querían ser libres: ‘¿Para qué la libertad?, ¿quién les va a dar la vivienda de ahora en adelante?’. Lo importante es que se haga pedagogía.
Las reformas están encaminadas en rescatar los derechos universales y que aquí los volvieron un negocio, como la salud. Por eso hay que estar acompañando las reformas que se necesitan y que el pueblo salga a la calle.
E.N.D.: En ese orden, ¿cómo vio el tema de las marchas que hubo a favor de Gustavo Petro y las centrales obreras?
R.L.E.: Vi que hay grandes manifestaciones en Medellín, en Bogotá con Petro a la cabeza. Yo hubiera querido estar, pero me comprometí con la labor académica que también contribuye a la construcción de la paz.
E.N.D.: Se puede decir que, para Comunes y sus bases ideológicas, ¿Petro le está cumpliendo a la izquierda colombiana?
R.L.E.: Sí señor. Seguro se equivocará y se seguirá equivocando como es toda construcción por obra humana. Pero la intención de él es consolidar la paz de Colombia.
E.N.D.: ¿Qué precisiones tiene frente a las consideraciones de Salvatore Mancuso ante la JEP?
R.L.E.: Yo saludo esa posibilidad que le dio la JEP a Mancuso. Con él estuvimos trabajando para hacerlo en el marco de la Comisión de la Verdad, y no se le dio el espacio para hacer lo que realizó en la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). Refuerza lo que se ha venido planteando, y da elementos de juicio, para que la JEP abra el macro caso del Estado porque este fue un conflicto en donde no hubo un solo actor.
Por eso se construyó la JEP, porque el Estado no podía ser juez y parte. Se creó una institución que estuviera por encima del estado mismo y que juzgara a los protagonistas del conflicto a partir de una concepción distinta a la justicia punitiva. El aporte de Mancuso es importante y más aún que la JEP lo recoja, porque servirá de elementos a los macro casos que se deberán abrir.
El foro académico en la Universidad del Tolima, fue organizado por la fundación Incoldes, la que acompaña a víctimas del conflicto en procesos de derechos humanos.
Lectura sobre las elecciones
E.N.D.: ¿’Jugará’ el partido Comunes en las próximas elecciones regionales?
R.L.E.: Claro, estamos trabajando en el marco del Pacto Histórico. Nosotros dijimos que nuestro primer compromiso cuando ingresamos a la coalición es trabajar por la unidad de la misma. En eso, las coyunturas electorales son muy difíciles y complejas, pero ahí estamos haciendo un esfuerzo grande y que ojalá logre llegar a varias regiones del país.
Hay un listado grande de candidatos, estamos en ese proceso bastante ‘chinchoso’ por la cantidad de papeleo y cosas por hacer, pero estamos trabajando y haciendo las cosas con optimismo.
E.N.D.: En cuanto a las dificultades, ¿qué les aqueja como partido político?
R.L.E.: Lo más complejo ha sido la falta de financiación, porque además los pocos recursos que llegan por parte del Estado, son fruto de una bolsa que reparten entre todos los partidos y ya vamos en 40 colectividades. En toda la lucha que vivimos, aprendimos a resolver situaciones complejas y ahí estamos trabajando.
E.N.D.: Respecto a los temas de seguridad en el país, la columna Dagoberto Ramos ha estado haciendo presencia entre el corredor del Cauca, Huila y Tolima. Mucho se ha hablado en el país frente a la disidencia de las Farc, ¿qué puede agregar?
R.L.E.: Hay una decisión política y una voluntad de parte del presidente Petro. Si de verdad se quiere resolver el conflicto, que sea a través del diálogo. Lo único que les diría es que si quieren estar en un proceso de paz en la coyuntura con Petro, deben generar hechos de paz y no de violencia.
E.N.D.: ¿Y qué debería pasar con las tierras en donde las disidencias ostentan control territorial?
R.L.E.: Esas serán definiciones de las negociaciones. Llegaron como actores a la misma región porque el Estado no cumplió con los acuerdos de paz. Nosotros dejamos las regiones, nos concentramos y fuimos a las zonas veredales, pero se incumplió el acuerdo principalmente en los territorios donde había presencia de cultivos ilícitos. Ahí quedó la semilla para que vuelvan a subir las expresiones de violencia.
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