Inconformes con la Administración Municipal se encuentran los loteros de Ibagué, pues en el proceso de recuperación del espacio público sobre la carrera Tercera, las autoridades les prohibieron vender sus productos.

La molestia por parte de este gremio de trabajadores radica en que a diferencia de los comerciantes informales, ellos no invaden el espacio, ni ocupan la calle con sus artículos. No obstante, la Policía les informó que sobre el eje peatonal no pueden vender los billetes de lotería.

De igual forma, alegaron que por más de 20 años han trabajado en el sector y que de ser trasladados perderían la clientela disminuyendo sus ingresos.

Sin embargo, la dirección de Espacio Público sostuvo que si los loteros quieren continuar con su oficio deben hacerlo en los sitios autorizados.

“Quitarnos de aquí es condenarnos al desempleo”, dijo uno de los afectados.

Para Jairo Rodríguez, uno de los loteros que desde hace 25 años trabaja  frente al Bancolombia de la calle 15 con carrera Tercera, la medida de  restablecer el espacio público sobre esta zona del centro, tuvo una buena acogida por parte del comercio formal y la ciudadanía en general, pero el problema fue que a ellos (loteros) también los clasificaron como invasores.

“La Policía no nos deja vender ni al frente del Banco, ni en los alrededores. Ellos nos dijeron que si nos encontraban trabajando ahí, nos iban a decomisar la mercancía.

“Tenemos miedo de que eso pase, pues en caso de que nos quiten los billetes de lotería, nadie se va a responsabilizar y esa plata la tendremos que pagar nosotros”.

Argumentos
Dentro de los argumentos expuestos por los loteros para que no los saquen de la 'Tercera', se encuentran los inconvenientes de inseguridad y el descenso de los ingresos para el área de la salud del departamento.

“Nosotros no podemos irnos a vender a la calle, porque es peligroso. Por ejemplo una fracción de lotería Extra, cuesta 15 mil pesos; es decir que uno carga entre 700 mil y un millón de pesos, y si nos vamos a recorrer la ciudad estamos expuestos a  que nos quiten todo.

“Por otra parte, no entendemos porque nos persiguen de esa manera, pues en la Lotería del Tolima cada día nos piden que vendamos más, pero las autoridades nos acosan y no nos dejan trabajar.

“Además con la venta de lotería es que en el Tolima se subsidia la salud”, indicó Guillermo Castiblanco, lotero.

Pedro Morales, otro de los loteros también expresó su preocupación porque el trabajo se les ha complicado.

“Yo llevo 35 años vendiendo lotería y está es la primera vez que nos ponen problema por trabajar por la 'Tercera', a nosotros nos parece una medida exagerada, ya que ninguno de mis compañeros ocupa indebidamente el espacio.

“Mi sitio de trabajo siempre ha sido en la calle 12 y ahí es donde me llegan todos los clientes. No queremos que nos saquen de acá, además somos nosotros los que trabajamos para la salud de los tolimenses”.

Las autoridades
Fredy Torres Cerquera, gerente de la Lotería del Tolima refirió que en los próximos días se reunirá con la Policía y la secretaría de Gobierno para analizar el temas. No obstante, el funcionario no está de acuerdo con que a los loteros se les catalogue como invasores del espacio.

“Lo loteros son personas que venden un producto del cual el 80 por ciento se destina a la salud. Además no hacen reguero en la calle, ellos simplemente llevan en su brazo las fracciones de lotería.

 “Otro aspecto a tener en cuenta es que el 90 por ciento de estos trabajadores son personas de la tercera edad. Lamentablemente el Estado no les ha prestado la ayuda necesaria para que ellos tengan una mejor calidad de vida, por eso nos reuniremos con las autoridades, porque este tema es de replantear”.

Diego Alejandro Olaya, director de Espacio Público respondió frente a los requerimientos de los comerciantes de lotería que para continuar con su oficio deben organizarse en lugares como la Plazoleta de Santalibrada, la Darío Echandía o las calles donde se ubicaron a los demás comerciantes informales.

“La recuperación de la 'Tercera' debe hacerse de forma integral. Nosotros en ningún momento estamos impidiéndoles el trabajo, lo que pasa es que ellos también se tienen que organizar como lo hicieron los demás comerciantes informales”, concluyó.