Los vecinos del sector aseguran llevar más de 25 años sin que se intervengan las calles más críticas; a pesar que se ha hecho el llamado a los diferentes entes administrativos y de control, no se ha tenido una respuesta favorable.

Gladys Rubio, residente en Arkalá, manifiesta que en reiteradas ocasiones se han presentado derechos de petición, pero no ha habido ningún tipo de compromiso; a pesar que el presidente de junta a gestionado la recuperación vial de algunas calles, la cuales han sido muy pocas.

Jeferson Camilo Sierra Leal, líder juvenil del sector, dice que “la mayoría de calles no están para transitar ni a pie y mucho menos en taxi porque no entran; la mayoría de veces toca el mercado cargarlo desde el lugar que el carro decide parar”.

Sierra Leal asegura que varios jóvenes y niños han resultado heridos cuando transitan en sus bicicletas, y debido el estado de la trocha han registrado graves accidentes.

Por su parte, Rubio manifiesta que el líder comunal se ha interesado en colocar un anden alrededor del parque contiguo a las “trochas”, por lo cual ha cometido un arboricidio, ya que en la zona los vecinos desde hace años han plantado árboles que contribuyen al ecosistema del espacio recreativo, pero para poner el cemento ha sido necesario derribarlos.

“He ido a Cortolima, donde me han dicho que el árbol de caucho frente a mi casa está en buen estado y no es necesario que lo corten, pero no quiere entender que aquí lo más importante no es el andén, si no que arreglen la calle, ya que eso realmente nos está afectando”, expresó Gladis Rubio.

A pesar de esta problemática y otras que padecen como la inseguridad, la necesidad de intervenir en la estructura del colegio del sector, al igual que el puente que atraviesa la unión de las microcuencas Las Panelas y La Balsa, no ha sido impedimento para que jóvenes como Sierra Leal y Miguel Moreno, realicen proyectos sociales en el lugar.