Salazar, a quien se le acaba de confirmar la sentencia por parte del Tribunal Superior del Distrito Judicial de Ibagué, fue hallado culpable luego de que se comprobará que éste había introducido su dedo índice en las partes íntimas de una menor de ocho años en una consulta médica, aún cuando ésta iba por un dolor de garganta en compañía de su madre .
Los hechos ocurrieron el 21 de abril de 2010 en la cabaña dos del Nuevo Hospital La Candelaria de Purificación y sólo hasta ahora se confirma la sentencia. La Defensa
En un comienzo, la Fiscalía imputó cargos por la conducta punible de acceso carnal abusivo con incapaz de resistir agravada, sin embargo, el 9 de julio de 2010, la Fiscalía presentó el escrito de acusación y varió la calificación jurídica para acusar al procesado por el delito de acceso carnal abusivo con menor de 14 años.
Después de ello y sólo hasta el primero de febrero del año pasado, el Juez de conocimiento condenó a Salazar a pagar 16 años y tres meses de prisión.
Ante ello, la defensa apeló el fallo argumentando, primero, que se anulara la entrevista que la psicóloga Ariza había hecho a la menor, porque según la misma defensa, la profesional no cumplió con los requerimientos necesarios para este tipo de procesos.
Segundo, agregó que Salazar era, para ese momento, el representante del Hospital de Purificación ante la Red mundial de apoyo, atención, prevención y seguimiento para la protección contra el maltrato infantil y el abuso sexual a menores , y aludió que el propósito de su defendido iba orientado a explicar a la madre de la menor, la posibilidad de que su hija fuera víctima de abuso sexual.
Por último, el defendido aludió que la niña presentaba con anterioridad lesiones que indicaban haber sido abusada. Estas son sólo algunas de las principales apelaciones interpuestas por la defensa ante el Tribunal Superior, pese a ello, el magistrado, luego de haber estudiado y analizado las pruebas y los testimonios de los implicados, concluyó y reafirmó la sentencia que se le había dictaminado a Salazar en primera instancia, el año pasado.
Detalles de cómo pasó
El 21 de abril de 2010, la señora Claudia Helena Betancourth Gaitán, ingresó al hospital La Candelaria por un dolor de garganta que presentaba su hija, en ese entonces, de ocho años.
Salazar Hernández , quien tenía su consultorio médico en Purificación, desnudó a la menor para examinarla y luego “llevo a cao un examen médico sexológico, para lo cual se puso unos guantes y le introdujo el dedo índice en la vagina (...)”.
Por su parte la madre de la menor, narró: “En la consulta solo estábamos los tres. Él me preguntó por qué llevaba la niña, yo le dije que presentaba dolor de garganta y necesitaba una cita con pediatría (…) en ese momento la niña levantó los brazos y vio que tenía una alergia y preguntó que eso que era.
“Yo le dije: no doctor, yo no traje a la niña por eso porque para ello me la está viendo un dermatólogo y eso es dermatitis”. Según la madre, el doctor Salazar no dijo nada sobre el dolor de garganta y desde el inicio de la consulta se enfocó en que la niña era abusada.
Luego, Salazar le manifestó a la madre que le iba a demostrar “que su hija estaba abusada “jamás imagine que le iba a introducir el dedo”, concluyó la progenitora.
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