Una rutina de costumbre por el parque principal de Ricaurte, Nariño, fue la última actividad de seguridad que hizo el subteniente Andrés Felipe Rodríguez Quevedo, comandante de la Estación de este municipio, el sábado a las 3:45 de la tarde. El ibagureño se había alejado de la Estación aproximadamente 70 metros cuando unos sujetos se le acercaron y a un metro de distancia le dispararon a quemarropa.

Según los testigos, el Comandante alcanzó a reaccionar y disparó contra sus agresores dejando herido a uno de ellos. Al escuchar el cruce de disparos se acercó como apoyo el patrullero Stiven Pasichaná Pusil, quien reaccionó con su fusil de dotación, pero lamentablemente no fue suficiente defensa, y recibió varios impactos de bala en la cabeza y sus extremidades, falleciendo en el lugar de los hechos.

De igual manera, quedó herido el auxiliar regular Jeferson González Jiménez, quien recibe atención médica en Túquerres.

A los pocos minutos las demás unidades de la Policía que estaban de servicio en la población reaccionaron y salieron en persecución de los responsables del acto criminal, los cuales descubrieron dentro de una alcantarilla, escondido, al hombre herido por el comandante Rodríguez, este cargaba un bolso en el que llevaba panfletos representativos del ELN, factor que apunta la responsabilidad del acto hacia dicho grupo insurgente.

La manera en que se presentó esta tragedia es extraña para el secretario de Gobierno municipal, Julio Manuel Cuastumal, ya que fue en plena luz del día y los atacantes estaban de civil y cometieron el delito con armas cortas.

“El parque municipal es una zona muy visible donde concurren muchas personas, por eso andar con armas largas sería imposible, se veía que los delincuentes tenían una estrategia, esperaron a que diera la espalda y dispararon con armas cortas”.

Así mismo, añade que el ataque a los agentes es motivo de zozobra “ya que desde hace dos años, desde que se iniciaron los diálogos de paz, el municipio había tenido relativas paz y tranquilidad, pero que se rompieron ayer con eso. Ahora en la comunidad de Ricaurte estamos consternados y preocupados por esta situación”.

Cabe recordar que el subintendente recientemente había cumplido 23 años y era hijo único, además su madre vive en Rovira.

Recompensa de $50 millones por información

La Policía ofreció recompensa de hasta 50 millones de pesos para quien dé información que permita la captura de los otros responsables de la muerte de los uniformados en esta población del Suroccidente del país.