En audiencia ante el Juzgado Promiscuo Municipal de Valle de San Juan, la Fiscalía reveló el supuesto actuar delictivo de Rafael Antonio Castro Medina, Cristian Camilo Rivera, Luis Alexander Restrepo y Fabian Edgardo Velázquez, funcionarios del Inpec a quienes se les legalizó su captura y se les imputó el presunto delito de concierto para delinquir con fines de extorsionar al interior del Complejo Carcelario y Penitenciario de Ibagué Coiba.

Durante la diligencia adelantada ayer en la tarde, se presentaron voluntariamente William Alberto González y Alexander Muñoz Duque a quienes se les atribuyó el mismo hecho.

Apoyo logístico

Según el ente investigador, los capturados apoyaban a los jefe de patio o ‘pluma’ para que adelantaran desde la prisión hechos extorsivos. La participación de los uniformados al parecer consistía en el ingreso ilegal de celulares, SIM cards, memorias, cargadores, pilas, dinero, entre otros.

En testimonios y declaraciones recolectadas por la Fiscalía, se narra que uno de los dragoniantes le entregó cerca de 300 SIM al ‘pluma’ del patio Siete conocido con el alias ‘Brasil’.

Del mismo modo, le hizo llegar 15 celulares y 17 cargadores. Por dicha entrega el funcionario habría recibido cerca de un millón 700 mil pesos.

Entre las presuntas formas de ‘colaborar’ también estaría el devolver los elementos que se quitaban tras las requisas o ‘rascada’ en las celdas, este hecho se facilitaba porque supuestamente no se reportaban los hallazgos, dicho proceso generaba una retribución económica por parte del ‘pluma’.

Asimismo, alguno de los funcionarios fueron señalados de alertar a los jefe de patio cuando se iba a adelantar las ‘rascadas’, de esta forma tenían tiempo para guardar los objetos ilegales, especialmente en el patio Siete.

Además de estos hechos, existirían algunos funcionarios dedicados al ingreso de significativas cifras de dinero, las cuales una vez eran reportadas a ‘Brasil’, procedía a esconderse en el caspeste del Coiba.

La ‘oficina’

Uno de los datos expuestos por la Fiscalía es que una de las formas de ingresar los celulares es a través de cajas de galletas y envolver el dinero en cinta aislante. Con esta ‘ayuda’, en una celda del patio Siete, se instaló una ‘oficina’, lugar en el que varios presos ‘trabajaban’ haciendo las llamadas extorsivas bajo la modalidad del tío – tía o simulando ser subversivos.

El ente investigador expuso que teniendo en cuenta los dispositivo de control que existen para los visitantes del Coiba, los celulares, memorias, pilas, cargadores, SIM, dinero, drogas y demás elementos debieron ser ingresados por personal de la institución, razón que originó la indagación y que dio como resultado varias pruebas en contra de los seis funcionarios.

No aceptaron cargos

En la audiencia de imputación de cargos, los seis funcionarios no aceptaron el delito atribuido, asimismo, los abogados defensores indicaron que los argumentos de la Fiscalía no fueron sólidos ya que no hay denuncias de las supuestas víctimas de extorsión y tampoco se precisó tiempo, modo ni lugar. Igualmente, que algunos de los acusados en una temporada no estuvieron en los patios que se mencionan en los testimonios y señalaron que no se puede dar total credibilidad a las declaraciones de los internos. A esto, la Fiscalía respondió que si cuenta con información sólida. Al cierre de esta edición se adelantaba la audiencia de legalización de captura.