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Una de las razones del porqué el Ministerio de Minas y Energía está en ‘jaque’ por estos días son las inconsistencias técnicas del informe “Balance de contratos de hidrocarburos y recursos disponibles para la Transición Energética Justa”.
Estas denuncias pusieron ‘sobre las cuerdas’ a la ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, quien defendió a capa y espada su estudio.
El escozor comenzó a finales de diciembre pasado cuando el propio Ministerio divulgó el polémico documento, según el cual Colombia tiene reservas de petróleo y gas hasta 2037 – 2042, por ello el país ya puede comenzar la transición energética, de la que habla el presidente Petro.
Hoy los ojos del país se centran, justamente, en la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), máxima autoridad en la administración de los recursos hidrocarburíferos.
Destapó su silencio
La primera víctima de este turbio panorama fue la saliente viceministra de Energía, Belizza Ruiz, quien abandonó su cargo por diferencias de fondo con Irene Vélez. Esto se dio tras las revelaciones de Caracol Radio sobre la inconformidad de varios funcionarios cuyas firmas aparecían en el informe, con cifras falsas o que tenían graves errores de interpretación y carecían de sustento técnico.
En entrevista para la revista Cambio, Ruiz reveló que la ministra Vélez le mintió al país. “La respuesta es sí y yo tengo la prueba. Sí mintió porque la Dirección de Hidrocarburos, en una comunicación de WhatsApp le manifestó los problemas del documento y al final le dice por favor no metamos el tema de reservas porque nos vamos a meter en problemas. O sea que sí hubo una comunicación no solamente del director de Hidrocarburos. En ese sentido, mintió”.
A juicio de Ruiz, las inconsistencias técnicas del informe de reservas y recursos están en que la principal dificultad técnica y metodológica del documento es que el nivel de reservas de gas surge de un análisis probabilístico y en probabilidad uno no puede sumar uno más uno.
“Las reservas probadas son el 90 % de probabilidad, las probables son un 50 % y las posibles son de un 10 %. Al contar con ellas, se tiene más o menos un aproximado de 12 años a 13 años máximo de reservas de gas. Pero las reservas no son estáticas, cambian y pueden aumentar”.
Más cifras
El más reciente informe de la Gerencia de Reservas y Operaciones de la ANH, sobre las reservas de petróleo y gas del país, publicado en mayo de 2022, da cuenta de que a 31 de diciembre de 2020 Colombia tenía 3.066 millones de barriles de petróleo, discriminados así: reservas probadas, 1.816 millones barriles; reservas probables, 697 millones, y reservas posibles, 533 millones.
Y para la misma fecha de 2021 eran 3.462 millones de barriles, discriminados así: 2.039 millones de reservas probadas; 782 millones de reservas probables, y 641 millones de reservas posibles.
Estas cifras de la ANH, de acuerdo con Francisco José Lloreda Mera, presidente de la Asociación Colombiana del Petróleo, indicaron que “Colombia tiene reservas de petróleo para 6 o 7 años, y de gas para 8 o 9 años”, es decir, menos de la mitad de lo planteado por la ministra de Minas y Energía.
A lo dicho por Lloreda Mera se agrega que la diferencia entre lo planteado por el Gobierno y la ANH radica en que se están sumando indicadores diferentes, de acuerdo con el exministro de Minas y Energía, Diego Mesa.
Sostuvo que “las reservas de gas no alcanzan para más allá de 2028. Los recursos contingentes hoy no son comercialmente viables y los prospectivos ni siquiera han sido descubiertos Conclusión: explorar más o importar”.
Los recursos contingentes de que habla el exministro Mesa son esas cantidades de petróleo y gas que se estiman pueden ser extraídas, mientras los recursos prospectivos son potencialmente recuperables pero aún no descubiertos. Por eso, afirmó que los recursos contingentes hoy no son comercialmente viables.
A la opinión de estos dos expertos se suma un reciente análisis del Instituto de Estudios en Regulación Minera, Petrolera y Energética de la Universidad Externado, en el que se advierte que, con base en las cifras de la ANH, “las actuales reservas del país alcanzarían para mantener la autosuficiencia en materia de petróleo hasta el 2028 y las de gas natural hasta finales del 2024”.
En este sentido, el experto en temas energéticos Sergio Cabrales concluyó que con las reservas probadas, posibles y probables solo se tendría gas natural para suplir la demanda hasta el 2027 y no a 2037.
“Desde el 1 de diciembre de 2022 estamos diciendo que las reservas probadas de gas de Colombia, que son las únicas con que se puede contar para suplir la demanda, no alcanzan para 20 años, alcanzan para 8 años o menos”.
¿Qué dicen los datos?
Si bien el exministro Mesa y el último informe de la ANH muestran que las reservas probadas de gas en 2021 fueron de 3.164 gigapies cúbicos, lo que cubriría el consumo interno de este energético durante ocho años, otras entidades tienen otros datos.
Un poco menos de tiempo es lo que da el último informe de Promigas, el cual muestra que el país no necesitaría importar gas hasta enero de 2027 (dentro de cuatro años), cuando, en el mejor de los escenarios, la producción llegará a 716 gigas de unidades térmicas británicas diarias (gbtud) y la demanda sería de 719 gbtud.
Muy cercano al informe de la ANH están las proyecciones de Naturgas, cuya presidenta, Luz Stella Murgas, anunció a finales del año pasado “que el país no debía preocuparse por importar gas al menos hasta 2030”.
Y mucho más allá va Ecopetrol, pues según su presidente saliente, Felipe Bayón, “si el país se lo propone y las condiciones son las apropiadas, podemos tener gas durante toda la transición energética que quiere adelantar el Gobierno y ser autosuficientes hasta dentro de 30 o 50 años”, dijo en octubre del año pasado.
Pronóstico de agotamiento
Para la ANH, con base en las proyecciones y análisis de las cifras, aunque la proyección total termina en 2058, haciendo un corte a 2031 se tiene que las reservas de petróleo para ese año serían: reservas probadas, 183 millones de barriles; reservas probables, 111 millones de barriles, y reservas posibles 89 millones de barriles.
Y en cuanto al gas, con las mismas proyecciones, se tendría para 2031: reservas probadas, 327 millones de pies cúbicos por día; reservas probables, 84 millones de pies cúbicos por día; y reservas posibles, 139 millones de pies cúbicos por día.
Así las cosas, los expertos consideran que es necesario esperar a que en mayo de 2023 la ANH revele la actualización del estudio anual ‘Reservas de Hidrocarburos del país , con corte a diciembre 31 de 2022’.
Sus resultados darán las luces definitivas que se requieren para definir el ritmo al que podrá avanzar la transición energética.
El documento de la ANH
El más reciente documento de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, de mayo de 2022, fue elaborado con base en los informes de 65 empresas del sector, y auditado por otras 12 compañías.
Se analizó la información reportada de 488 campos en 2020 y 452 en 2021: en total fueron reportadas reservas y recursos de 304 campos petroleros, 33 de gas, y 72 de petróleo y gas.
Por departamentos, se desprende que los de mayores acumulados son: Meta, que tiene 1.053 millones de reservas probadas de petróleo, seguido de Casanare (349 millones) y Santander (175 millones de barriles).
En cuanto a gas, señala el documento, que a 31 de diciembre de 2020 había en el país 4.031 gigapies cúbicos, discriminados así: 2.949 gigapies en reservas probadas; 632 gigapies en reserva probables, y 450 gigapies en reservas posibles.
Y para el cierre de 2021: 4.493 gigapies, distribuidos así: 3.164 gigapies en reservas probadas; 689 gigapies en reservas probables, y 640 gigapies en reservas posibles.
Por departamentos, los que tienen las mayores reservas probadas de gas son: Casanare, 1.655 gigapies cúbicos; La Guajira, 579 gpc y Córdoba 276 gpc; les siguen, en menor proporción, Boyacá (164 gpc); Sucre (146 gpc), y Santander (133 gpc).
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