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Para poder asistir al Campeonato Mundial Máster de Natación con Aletas disputado en El Cairo, Egipto, la deportista tolimense, Beatriz Mozo, tuvo que realizar grandes sacrificios. Eso sí, al final todos valieron la pena.
Y cómo no, si la ibaguereña consiguió superar el registro que dejó en la cita orbital de 2022 disputada en Medellín, donde se colgó cuatro medallas doradas, una de plata y sumó un cuarto lugar.
En esta ocasión, en la tierra de los faraones, la deportista de alto rendimiento volvió a bañarse en oro en cuatro ocasiones (50 mts apnea, además de 50, 100 y 200 mts superficie), también se llevó la plata (50 mts bialetas) y, además, le agregó un bronce (100 mts bialetas) a su estantería.
“Estoy muy feliz. La alegría estando en el podio era inmensa, ya que pensé en todo el esfuerzo que hice para estar allí, y en las lágrimas que derramé cada vez que me cerraron las puertas cuando pedí apoyo”, sostuvo la ‘Pijao’.
Y agregó que “yo siempre he pensado que cuando uno hace las cosas bien, siempre llegan las recompensas. Eso sí, fue bastante duro poder estar presente en El Cairo. Los rechazos que recibí fueron bastantes.
En cuanto a los organismos del deporte de mi Región, me dijeron que no hay presupuesto para los deportistas máster, que todo está pensado en los Juegos Nacionales que se desarrollarán este año”.
Mozo indicó que “es duro que a nosotros los máster nos vean diferente porque ya somos mayores, o porque tenemos un empleo. Uno trabaja para los gastos normales, y eso muchas veces no alcanza para cubrir la inversión en la preparación para competir por los colores del Departamento y del País”.
Beatriz resaltó que, “aunque no lo parezca, practicar natación con aletas es costoso. La indumentaria tiene valores altos, y a eso hay que sumarle otros ítems. Por ejemplo, en el Mundial, yo tuve que pedirle prestada la aleta a una amiga de Alemania.
Además, el club al cual represento, Halcones Marinos, también me cedió una de sus monoaletas para poder competir en una prueba. Y en el caso del vestido de baño, usé uno normal, y no el traje de competencia”.
A pesar de todas estas situaciones incómodas, Beatriz aseguró que “esta fue una competición muy bendecida, ya que me pasaron cosas muy bonitas. Por eso estoy muy agradecida con Dios y, por supuesto, con mis familiares y amigos que me respaldaron moral y económicamente para dejar en lo más alto el Tricolor Patrio”.
De los gastos en Egipto, Mozo contó que “fueron aproximadamente 16 millones de pesos. Lo más costoso fueron los tiquetes, que tuvieron un valor de 9 millones. Y de ahí para adelante son muchas cosas, casi todo pagado en euros.
Ahí se pueden hacer una idea de lo difícil que fue reunir esa plata. Por eso digo que, al estar montada en el podio, sentí mucha felicidad, no solo por la victoria, sino por lo que pasé previamente para conseguirla”.
Cabe resaltar que, desde ya, Beatriz iniciará el proceso de recolección de recursos para defender su corona en la cita orbital de 2024, pues se disputará nada más y nada menos que en Serbia (Europa).
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