Según los indicadores de pobreza, el 32.9 por ciento de las personas están en situación de pobreza de ingresos y el 19 por ciento presentan carencia de tiempo para la producción doméstica del hogar.
Se detectó que el 35.5 por ciento de las personas encuestadas se encuentran en situación de pobreza de tiempo e ingresos, es decir, que no tienen ingresos suficientes para alcanzar la línea de pobreza y para comprar el déficit de tiempo para cubrir los requerimientos de producción doméstica.
Esta cifra se encuentra 2.6 puntos porcentuales por encima de la pobreza monetaria, a esta diferencia se le conoce como pobreza oculta.
Respecto a los hogares, el 26.5 por ciento son considerados pobres de ingresos y el 52.8 por ciento son pobres de tiempo, esta última condición se presenta cuando por lo menos una persona adulta en el mismo presenta déficit de tiempo, por lo que no aplica la compensación entre el total de sus miembros.
Por su parte el 28.9 por ciento de los hogares se encuentran en pobreza de tiempo e ingreso, detectando una pobreza oculta de 2.4 por ciento.
Revisando este indicador por género, el 34.4 por ciento de los hombres presentaron pobreza de tiempo e ingreso. Para las mujeres se observa una pobreza de tiempo e ingreso de 36.6 por ciento.
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