Los ciudadanos beneficiarios resolvieron reconocer a una junta administrativa para el acueducto, en lugar del presidente de la Junta de Acción Comunal, quien había estado encargado de la gestión durante varios años, a pesar del descontento de la comunidad.
Hace algunos meses se hizo pública la problemática que atravesaba el barrio debido al repentino desabastecimiento que sufrían los usuarios del servicio de agua con el que contaban regularmente. Esto, sumado a que las condiciones insalubres del agua condujo a los beneficiarios a denunciar públicamente la situación.
De acuerdo con Angélica Bosa, veedora para el acueducto de El Triunfo, la situación se generó tras la aparente autorización indebida del uso del agua por parte de los casi mil apartamentos del proyecto Almínar Samoa. Tal autorización no contó con la aprobación de la comunidad y se realizó incluso a pesar de que la corriente de agua es insuficiente para cubrir la cantidad de familias que habitarían las nuevas viviendas.
De hecho, incluso el agua que consumen actualmente las familias, a través de un servicio notablemente más regular, no cuenta con las condiciones indicadas para el consumo humano. Bosa manifestó que desde el 2011 se había recibido una planta de tratamiento que solo hasta principios de este año se puso en funcionamiento, por lo que el tiempo la deterioró en gran medida.
El acueducto cubre a usuarios de El Triunfo, El Mirador, Bellavista y Ciruelos, por lo que en su momento la situación fue bastante grave. Hoy en día, algunos de los problemas más urgentes fueron solucionados por la propia comunidad, aunque continúan muchos faltantes.
Autogestión
La comunidad, a pesar de las declaraciones y documentos que han enviado a diferentes entidades como Cortolima, y el tiempo que ha transcurrido desde el momento más álgido que atravesaron, no ha conseguido ninguna solución, así que ellos mismos intervinieron el acueducto y realizaron lo que consideraron pertinente y más urgente.
“Si nosotros elegimos una junta administradora, esa junta debería ser la que estuviera manejando el acueducto y no el señor Becerra, sin embargo él hace caso omiso a lo que la comunidad dice”, dijo Bosa, refiriéndose a la actual relación entre los usuarios del acueducto y el presidente de la JAC.
La comunidad se coordinó y movilizó hasta la zona de la bocatoma y los tanques, donde dicen haber encontrado en abandono el sistema, y realizaron una jornada de limpieza como un acto preliminar. Hace ya mes y medio se realizó dicha jornada, y a partir de ahí encargaron a un fontanero de los servicios constantes de cuidado, limpieza y reparación del sistema.
La indignación de la comunidad se debe al manejo ineficiente que se le ha dado a los recursos del acueducto y a los apoyos que el municipio ha orientado con el mismo fin. La falta de mejoras al acueducto condujo finalmente a que la ciudadanía no reconociera al presidente de la JAC.
“Nos dimos cuenta que el señor Becerra les había entregado las disponibilidades a la construcción de esa forma tan irregular... En la parte de abajo la presión del agua baja muchísimo, debido a todo eso la comunidad decidió cortar el tubo que se había instalado para los edificios de Samoa”, contó la veedora.
La preocupación se enfoca no solo en ellos mismos, sino en algunos habitantes que ya están en el proyecto, a quienes les dijeron que tendrían agua potable, sin ser así por medio del acueducto El Triunfo. Sorprende la cantidad de irregularidades que se desprenden de todo el tema.
Los faltantes
Debido a la falta de reconocimiento que ha tenido aún la junta administradora por parte de los entes responsables, muchas acciones no se han podido realizar, dado que hace falta el apoyo técnico, logístico y de seguimiento para el mejoramiento del acueducto. A día de hoy la autoridad sigue siendo de Becerra, aún a pesar de los incumplimientos que éste ha dado ante las autoridades y la comunidad.
Entre los faltantes está la formación de los encargados de la junta administrativa para el manejo de la potabilización real. Otro de los puntos es el reemplazo de los equipos del acueducto, dañados por el tiempo sin uso.
El papel administrativo
La falta de verificación en estos procesos contrasta con los trámites que solucionarían la situación, o que por lo menos conducirían al reconocimiento de la Junta elegida por la comunidad.
Dato
Hoy, en debate, el Concejo discutirá sobre esta problemática que afecta no solo a los habitantes de la zona, sino al megacolegio del Mirador de Ambalá.
Comentarios