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Según el administrador del bar, dos hombres entraron al establecimiento y estaban consumiendo licor hasta que uno de ellos salió rápidamente. El otro hombre, a los pocos minutos, se desplomó sobre la mesa.
Ante esta situación, se llamó a las autoridades, los cuales confirmaron el fallecimiento del sujeto, quien resultó ser un sacerdote.
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La autoridades pudieron confirmar que la persona fallecida era el sacerdote Javier Eduardo González Pertuz, formador en el Seminario Misionero San José en Medellín.
“Nos acompañó en varias ocasiones en la Semana Santa de nuestra parroquia, Dios conceda la paz para su alma”, escribió la Parroquia Nuestra Señora del Rosario de Itagüí a través de su página de Facebook.
La hipótesis que se maneja es que la muerte del religioso se debió a que le aplicaron escopolamina con la intención de robarlo.
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