La creación de la Policía Metropolitana de Ibagué estuvo orientada desde su inicio al mejoramiento del servicio de policía para contrarrestar los fenómenos delincuenciales y cumplir con las exigencias en materia de convivencia y seguridad a la comunidad Ibaguereña y tolimense, este cambio obedece la dinámica variable de los fenómenos delincuenciales, ya que los métodos aplicados por los criminales de hoy para lograr sus intensiones ilícitas presentan algunas variaciones en su propósito de evadir el control de las autoridades,  no obstante, el desinterés, aunado a la ingenuidad de algunas personas, permite la materialización de delitos.

Frente a este aspecto, cabe destacar que el trabajo de la policía nacional, no siempre está enmarcada en las acciones de represión a través de las actividades de control y/u operativas (allanamientos, capturas, requisas, etc), también, está alineado en la prevención, toda vez que muchas de las campañas de seguridad, se orientan a la advertencia del delito, incidiendo entre muchas, las realizadas para evitar que la comunidad sea víctima del fleteo, paseo millonario, paquete chileno, entre otras modalidades delictivas, donde el éxito de las medidas, está en la concientización y aplicación que hace de éstas el cliente de nuestra institución;  el ciudadano.

Por otra parte, es lamentable que se estén presentando hurtos en sus diferentes modalidades, bajo metodologías delictuales ambiguas, que se son de pleno conocimiento de la comunidad y que su común denominador es el descuido y falta de celo en elementos, inmuebles y personas. Por lo tanto, es necesario recordar que el compromiso es de todos para la seguridad, donde existe una corresponsabilidad para la prevención de delito; por ello, se insiste en el trabajo mancomunado, tendiente a blindar el hogar, la familia, el trabajo, el barrio, la cuadra y su vivienda del asecho de los delincuentes, contrarrestando la indiferencia y tolerancia frente al delito, invitándolos a que participen en las estrategias de seguridad que viene implementando esta metropolitana y trabajar desde su espacio, con sus vecinos, amigos y familiares para afrontar los fenómenos delictuales que afectan la seguridad de todos, denunciando hechos o situaciones sospechosas conocidas.

Este escenario me permite instar en la importancia de unirnos en torno al Plan Nacional de Vigilancia Comunitaria por Cuadrantes PNVCC,  esencialmente conocer el cuadrante de policía que corresponde a la jurisdicción donde vivimos, estudiamos y trabajamos, tener a la mano el número celular del cuadrante e identificar los funcionarios de policía asignados en los mismos, interactuando coordinadamente y generando cultura de trabajo en equipo, sería el inicio de esta tarea, en pro de lograr los objetivos propuestos en materia de convivencia y seguridad. Así mismo, llamo la atención de aquellas personas que confunden el temor con la indiferencia, invitándolos a generar acciones de conciencia ciudadana en forma oportuna, sin esperar que los toque la acción de los delincuentes para entender que la paz y tranquilidad de nuestra región depende del aporte que cada ibaguereño y tolimense  haga para generar espacios de tranquilidad para nuestros hijos, nietos y la futura generación.

DIOS Y PATRIA.