Es un orgullo para los ibaguereños conmemorar los 465 de su ciudad, fundada por Andrés López de Galarza en 1550, siendo una de las ciudades más antiguas de América, denominada Capital Musical de Colombia por el francés Conde de Gabriac hacia 1886, sorprendido con el ambiente musical en la ciudad, sus coloridos murales de los edificios del centro y el Conservatorio del Tolima; igualmente, por conservar el patrimonio del folclor colombiano, estatus que engalana en los diversos certámenes musicales y donde hacen sentir sus raíces con la interpretación de un elemento musical el cual han atesorado desde niños.
Esta misma belleza regional es vista por muchos viajeros, que aprecian los paisajes y el calor de sus habitantes, escenario propicio para exaltar las zonas turísticas, su comercio y su gastronomía, es una fecha para tener un alto sentido de pertenencia por la ciudad, máxime con su vinculación en la organización de los Juegos Deportivos Nacionales; es el momento para mostrar todo el potencial de la raza pujante, invitando a cada habitante de Ibagué a multiplicar su cultura ciudadana, el amor por esta tierra y sus costumbres.
Es el momento de insistir en qué tan buen ciudadano es usted, aprovechar esta emotiva conmemoración para hacer un cambio en el comportamiento para con la ciudad, destacando que esta cultura obviamente viene desde casa, donde se recibe la primera y más básica educación, así como el conocimiento de los valores de la familia, escenario formador de hombres y mujeres baluartes para una sana y pacífica convivencia en el hogar y replicado hacia la sociedad. Hay que recordar un poco que en otrora era fundamental enseñar a los hijos a respetarse y aceptarse mutuamente, a compartir y resolver conflictos mediante el diálogo, aportar y aceptar la opinión de los hermanos y acatar con respeto la autoridad de los padres, a cumplir reglas, obviamente basado en amor y la comprensión, toda vez que la familia era lo más importante, siendo necesario destacar que cada habitante de esta ciudad hace parte de la gran familia ibaguereña.
Ahora bien, es importante fortalecer estrategias que permitan combatir escenarios de dificultad por hogares disfuncionales, con niños, niñas y adolescentes individualistas, algunos han recibido desde cuna todo lo que se les antoja para que se sientan a gusto, haciéndoles creer que se merecen de los demás todo, sin dar nada a cambio y otros, que asumen sus limitaciones como una guerra contra la ciudad, con un agravante, se convierten en personas vulnerables ante las adversidades, sin capacidad de resolver conflictos en su vida y caen la depresión y frustración, siendo evidente que el valor de la familia lamentablemente está en decadencia y es ahí donde se requiere aunar esfuerzos que permitan consolidar hogares fortalecidos en valores, prestos a contribuir en la convivencia de su ciudad. Que mejor regalo para la ciudad, seguir formando mejores hombres y mujeres, hay que iniciar esta importante tarea desde el hogar, existe una frase célebre, muy conocida por todos, pero poco aplicada por muchos. “Educa a los niños y no será necesario castigar a los hombres”. Finalmente, se exhorta a cada habitante de la región a participar de forma positiva en los diversos eventos que se desarrollarán a razón de esta importante celebración. DIOS Y PATRIA.
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