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Se ha tomado información excepcional y no la recurrente, sobre salarios de profesores universitarios estatales, que presuntamente son altos, sin determinar el porcentaje sobre la totalidad de cada una de las universidades estatales en Colombia.
Es necesario un diagnóstico claro, que caracterice, identifique y relice un análisis estadístico sobre el asunto , y no se conviertan en un escándalo innecesario, puesto que son muchos los factores producto de diversas categorías los que aquí deben tenerse en cuenta.
Es difícil demostrar que hay excesos en el sueldo de los docentes universitarios y se puede decir que el promedio del salario está entre los 8 y 11 millones de pesos mensuales, dependiendo de la universidad, del nivel de formación académica, con la exigencia de que se trate de profesor con título de doctorado ; de los años de experiencia calificada que acredite; de la productividad académica expresada en publicaciones; del escalafón en el cual esté ubicado y del tipo de vinculación que tenga, entre profesores de tiempo completo, de cátedra, ocasional, de medio tiempo, entre otros.
Los salarios mensuales de los profesores universitarios no son los más altos, ni los mejores, si se tiene en cuenta su desempeño de muchas horas de docencia, investigación y proyección social, exigibles a un profesor de tiempo completo, a los cuales se le debe agregar las horas que debe dedicar a la investigación a través de las cuales incrementa puntos por las publicaciones de artículos científicos o libros sobre lo cual puede sumar 20.895 pesos por cada punto que se le asigne, siempre y cuando en uso de la autonomía universitaria, este valor determinado por decreto, se respete.
Existe el imaginario de que un profesor universitario tiene salarios más altos que los de otros funcionarios , entre ellos los docentes de la educación básica y media quienes también merecen la dignificación salarial y para el caso del 1278 de 2002, ha venido en mejora. Sin embargo, la realidad es otra, hacia el año 2024 en curso.
De acuerdo con el decreto 1279 de 2002 que regula los salarios de los profesores oficiales de las instituciones de educación superior, entre ellos los universitarios, un profesor tiene la opción de ganar un salario entre 8 y 11 millones de pesos, si acredita título de doctor (sólo 172 en la Universidad del Tolima, sobre una planta de profesores de tiempo completo de 332, en el 2022), a donde se ingresa con 6 millones con título de doctor y el promedio salarial no supera los 8 millones.
La situación es tal que con título de posgrado de maestría o doctorado , un docente de educación básica y media puede lograr un salario superior al de la universidad oficial. En educación básica (primaria, secundaria o media) tiene la opción de tener un salario de 9 millones 255 mil pesos si acredita título de maestría y ha llegado a la categoría D del escalafón del decreto 1278 de 2002; y 12 millones 312 mil pesos si ostenta título de doctorado y ha alcanzado la máxima categoría D. A ello que puede incrementar el 30 por ciento si se desempeña en un cargo de rector de institución educativa. Si se asume la rectoría de una institución con tres jornadas, el salario es de 16 millones, valor aún bajo, para el arduo trabajo y responsabilidad que implica la gestión educativa.
Entonces, no son las escalas salariales de los profesores universitarios, ni de los profesores en general de los otros estatutos docentes, , los causantes de la crisis financiera que agota a las universidades oficiales de Colombia (déficit financiero de 350 millones en la Universidad de Antioquia). Escalas salariales que son distintas en cada universidad, debido a la autonomía universitaria vigente.
¡El debate debe darse!
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