PUBLICIDAD
El reporte de septiembre de este año reportó oficialmente la realidad que están viviendo los hogares Ibaguereños, el mercado está muy caro y la plata ya no alcanza como antes. Atrás quedaron aquellos días en donde nuestra inflación era de las más bajas en el país.
Para entender por qué está sucediendo esto se debe revisar la variación de los precios por divisiones de bienes y servicios. La subida de precios que más afectan la calidad de vida de las familias pobres son los alimentos y bebidas no alcohólicas, el alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles, y transporte.
Con esta breve introducción revisemos porque Ibagué aparece en el tercer lugar en la variación mensual del IPC con 1,15, y con una variación anual de 12,54 por encima del promedio nacional de 11,44.
Para esta ciudad, la variación año corrido en alimentos y bebidas no alcohólicas es de 23,48, en alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles es de 4,59, y en transporte es de 9,06. Al revisarse la variación anual, se encuentra que en alimentos el aumento fue de 30,16, en alojamiento 5,54, y en transporte 10,96. En un lenguaje menos técnico y sin tantas cifras los datos nos muestran que Ibagué es la segunda ciudad, después de Neiva, con mayor incremento en alimentos y bebidas no alcohólicas, y la cuarta con mayor incremento en transporte. Como ya se dijo, esta situación afecta significativamente a los más pobres, aquí existe una explicación de porqué en Ibagué un 23% de los hogares ibaguereños están comiendo menos de tres comidas al día.
La variación mensual del IPC de electricidad en Ibagué fue de 3,5 para septiembre, ubicándose como la cuarta ciudad con mayor crecimiento, por debajo de Cúcuta, Medellín y Armenia, y por encima del promedio nacional (2,09). Este dato hace válida la permanente queja de los ibaguereños sobre el alza en los precios de las facturas de energía eléctrica de Celcia.
La inflación tiene su explicación en la intensa devaluación del peso frente al dólar y en el aumento de los costos asociados con las disrupciones en el transporte internacional y con la guerra de Ucrania. Estudios muestran que el alza del dólar por encima de $4.500 afectaría el 20% de la canasta básica. El Ministro Ocampo sabe que las alarmas están prendidas frente al incremento del precio de la gasolina ya que esto aumentará la inflación, que el proyecto de reforma tributaria no está mandando las señales que el mercado quiere ver, y que se debe disminuir la incertidumbre creada por estos días ya que la estampida de capitales generaría más devaluación y más inflación.
Finalmente, no sobre decir que el control de gastos y consumo inteligente en el hogar puede ayudar a hacer más llevadero este fenómeno.
Comentarios