Los datos disponibles sobre la eficiencia interna en el sistema escolar en el Tolima nos dicen que de cada 100 estudiantes matriculados en la educación básica y media, 12  “pierden el año escolar” (reprueban) o abandonan (desertan) las aulas durante el curso del año escolar.

Traducido esto a números absolutos, este porcentaje equivale a decir que la “mortalidad académica”, expresión de fracaso escolar e ineficiencia ,  en nuestro departamento, según cifras del DANE(2021), equivalen a decir que  en Tolima, incluyendo a Ibagué,  31.858 estudiantes (11,6%) sobre un total de 275.164 matriculados, se desagregan  en 20.311 estudiantes reprobados debido a  resultados insuficientes o deficientes en tres o más asignaturas del plan de estudios y, en el mismo año escolar 11.547 desertaron por diferentes motivos. Son datos de bajo desempeño académico, desde luego.

Sin el análisis se hace sobre otros factores de fracaso escolar, durante el curso del año escolar de 2021, habría que agregar, un 4.34% de repitencia de grados  y 5.03 de matrícula extraedad , es decir, de aquellos estudiantes cuya edad supera la establecida para cada grado, esto último en los 46 municipios no certificados a cargo de la gobernación. Fenómeno que afecta la convivencia en las aulas.

Hay otros indicadores de la situación educativa en el departamento que implican problemas situaciones problemáticas, Entre estos, la disminución paulatina de la matrícula y el bajo desempeño en las pruebas Saber que realiza el Icfes.

Se hace la advertencia de que se trata de problemas que también afectan a otros departamentos. El Tolima no está entre los departamentos de más bajo desempeño en cuanto cobertura y  rendimiento académico de sus estudiantes.

Si en la actualidad la mayor preocupación, dada por situaciones problemáticas críticas en el país y en el Tolima , están en el conjunto de factores de seguridad o mejor, de inseguridad, desempleo y pobreza, en el Tolima no se puede pasar por alto cuanto está ocurriendo en el sistema escolar, principalmente en lo relacionado con calidad educativa y permanencia de los estudiantes en los planteles educativos.

Si se hace la analogía con lo que puede ocurrir en cualquier empresa de producción de bienes y servicios , si hay pérdidas como resultados de su productividad, muy seguramente se estaría ante una eventualidad de cierre o de menor productividad en estas empresas.

¿Qué puede ocurrir en el sistema escolar del Tolima si siguen avanzando negativamente estos indicadores y otros que aquí no se registran?

FACTORES CAUSANTES DE LA REPROBACIÓN

No es del caso abordar el análisis de todos los factores causantes de la alta reprobación “pérdida del año escolar” , pero es pertinente hacer referencia a los más significativos.

Hay respuestas que surgen de cuanto tiene que ver con lo que piensan y sienten los estudiantes matriculados.

Un factor causante tiene que ver con lo que se enseña y como se enseñan las asignaturas o áreas del plan de estudios obligatorio. Hay poca pertinencia educativa, poca pertinencia curricular  porque no se enseña lo que les interesa a los estudiantes , a los padres de familia y a la sociedad en general.

Los directivos docentes , rectores y coordinadores, no siempre se preocupan por los aspectos académicos y pedagógicos de su institución escolar, siendo que , en gran parte , depende de estos directivos del platel, cuando ocurra en el contexto institucional de éstos.

Julián de Zubiría, pedagogo y columnista de prensa, director del Instituto Alberto Merani de Bogotá, ha hecho propuestas sobre su modelo de pedagogía dialogante  que incluye innovaciones y atención a las necesidades emocionales de los estudiantes.

Zubiría propone “mejorar la calidad de la educación, hay que transformar las facultades de educación… En el país existe amplia evidencia  sobre los bajos resultados de las licenciaturas y de las facultades de educación… acabar con la fragmentación curricular…mientras los niños sigan viendo 15 asignaturas fragmentadas y desarticuladas, no podrán desarrollar competencias para pensar e interpretar”.

Atendiendo lo que dice Zubiría y las conclusiones  de la investigación educativa que se han ocupado del análisis de la situación del sistema escolar  del país, se puede concluir que con los recursos humanos disponibles, es decir con el nivel educativo alcanzado por los docentes del Tolima, es posible realizar cambios curriculares de fondo.

Para realizar una transformación curricular, soportada en la necesidad de modificar el actual modelo educativo tradicional imperante; se requiere una formación específica sobre diseño y desarrollo curricular que inclusive se puede realizar con el apoyo de los docentes de cada institución escolar.

Se hace necesario y urgente, tener en cuenta los intereses de formación de los estudiantes, para que ellos definan, en gran parte, lo que desean aprender. Porque, en gran parte, la reprobación o pérdida del año escolar, tiene como causas, el poco interés de los estudiantes por el estudio, los estudiantes se aburren en los planteles educativos, ven poco útil lo que se les enseña, para el presente y el futuro.

 La Universidad de La Salle de Bogotá, en 2015, realizó una investigación en torno a esta pregunta: “¿Qué piensan , quieren y esperan los jóvenes de hoy? Investigación sobre creencias de los estudiantes de colegios oficiales de Bogotá”.

Hay respuestas de los estudiantes que son válidas para tener en cuenta al realizar una reforma curricular que satisfaga los intereses de los estudiantes sobre las creencias que ellos tienen sobre el mundo escolar, porque las creencias de una u otra manera, condicionan sus  intereses de formación y sus comportamientos.

Así, por ejemplo, en cuanto a las prácticas evaluativas, ellos tienen la creencia de que “Las formas de evaluación que proponen las instituciones escolares no cumplen y no dan soluciones a las necesidades de los estudiantes…que  ejercicios de “entrenamiento” para pruebas Saber  son importantes solo para las directivas del colegio, para ocupar un buen puesto y lograr un número mayor de estudiantes nuevos.  

Tienen la creencia de que “Las normas presentes en el manual de convivencia no cobijan a todos los miembros de la comunidad escolar y están hechas para restringir y castigar a los estudiantes”, creencia que coincide con concepciones que se tienen sobre la evaluación en cuanto esta es punitiva y se utiliza para controlar, dominar y castigar, tal como lo concibe el filósofo francés Michel Foucault en “Vigilar y Castigar” (2001) .

“Lo que dicen los estudiantes cuando comparan el salón de clase con una celda de prisión. Los estudiantes aseguran que el salón solo sirve para mantenerlos en control y orden en cada una de las clases”.

Son por lo menos algunas de estas  ideas que pueden ser hechas realidad, sin mayores costos, para mejorar el desempeño  académico de los estudiantes y evitar esta avalancha de datos negativos sobre fracaso escolar en el Tolima y en Colombia.

   ¿QUÉ HACER PARA DISMUNUIR LA REPROBACIÓN ESCOLAR?

Hay suficientes oportunidades para modificar e incluso eliminar el fracaso escolar, expresado en los indicadores de eficiencia interna que afectan el cumplimiento del derecho a la educación de infantes, jóvenes y adolescentes del sistema escolar.

Se pueden implementar estrategias  para prevenir la ocurrencia de la reprobación escolar, para disminuirla e inclusive para eliminarla, por lo menos en los primeros grados y ante circunstancias especiales.

En cuanto a la prevención, lo primero es cumplir las normas vigentes sobre evaluación, entre ellas el mandato del decreto 230 de febrero de 2002, según el cual cada plantel educativo debe garantizar , como mínimo, la promoción del 95% de los estudiantes evaluados.

¿Por qué , entonces, las tasas de reprobación o pérdida del año escolar superiores al 7% , según datos del 2021, en Colombia , el Tolima e Ibagué?

 Docentes y directivos docentes están incumpliendo las normas sobre evaluación escolar de los aprendizajes de sus estudiantes.

La evaluación de los aprendizajes de los estudiantes debe hacerse a través técnicas e instrumentos de evaluación cualitativa, entre ellas la autoevaluación,  en consecuencia no debe estar basada en números.

La escala cualitativa debe ir de excelente, sobresaliente, aceptable, insuficiente y deficiente. La calificación numérica debe desaparecer.

En el desarrollo del currículo escolar, este debe ser flexible  y responder a criterios de pertinencia educativa para que lo que se enseñe satisfaga los intereses de formación de los estudiantes.

Se debe aplicar estrategias de adecuación curricular para garantizar la permanencia de los estudiantes en las aulas.

Está establecido por normas del Decreto 1411 de julio 29 de 2022, que los docentes y directivos deben “favorecer la expresión de las emociones de sus estudiantes…Aportar al bienestar emocional” en las aulas y en los planteles.

Entonces, hay que enseñar y los estudiantes deben aprender en ambientes físicos y psicosociales agradables, que susciten felicidad y alegría. Cada docente debe aprender a saludar y ofrecer alegría en los procesos de enseñanza. La felicidad se debe enseñar.

Comencemos por estas decisiones que no son costosas. Pero debemos llegar a eliminar la reprobación escolar, por lo menos en los primeros 4 años de la educación primaria. ¿Por qué no lo intentamos?