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Ese fue el caso de Rovira, donde una paciente adulto mayor llegó a las urgencias del hospital San Vicente con complicaciones asociadas al coronavirus, pero falleció en días recientes porque no había una cama para su atención y tampoco en otros municipios. Luego de 10 horas intubada, resultó una en Lérida, pero no resistió y perdió la lucha.
“Nosotros en este momento estamos pasando por una situación especial en el municipio (...) hemos tomado la decisión junto al Consejo Municipal de Gestión del Riesgo en aunar los esfuerzos e iniciar nuestro toque de queda.
“Con lo que está pasando en el hospital de Rovira, casos que nunca habían sucedido en estos casi diez meses de pandemia, es primera vez que tiene nueve casos en el área Covid, de los cuáles uno acaba de fallecer, una en similares circunstancias que nos van a dejar en casos donde no vamos a poder conseguir camas UCI porque el Tolima está totalmente copado (...) por eso en este momento se decreta la alerta roja”, afirmó el médico Diego Andrés Guerra, alcalde de Rovira.
En Purificación
Mientras tanto en el suroriente tolimense el panorama es similar, y todo debido al ciento por ciento de ocupación de camas UCI. Y es que el alcalde del municipio, Cristian Barragán Correcha, anunció que la unidad de cuidados intensivos del nuevo hospital La Candelaria llegó a la totalidad de su capacidad, “esta información, suministrada por el hospital, da cuenta de lo complejo de la situación actual de nuestro principal centro de atención de salud”.
Explicó que actualmente “las camas y camillas disponibles en hospitalización son 14 para hombres, mujeres, pacientes quirúrgicos, de gineco-obstetricia y pediatría (...) Por eso cuídate, cuídame. Es por ti, por mí, por todos nosotros”.
Finalmente, dijo que en urgencias hay nueve camas disponibles y en expansión hospitalaria hay disponibilidad de tres camas para adultos y dos para menores de edad.
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