Afortunadamente el proceso electorero en la UT ha servido para sacar a luz temas conocidos y ocultos sobre la realidad del centro de educación superior. Un rector mal asesorado por conversos y trepadores que salieron a reptar cuando creyeron que la deslealtad y la tirada de petate podría significarles beneficios personales.
La Asamblea del Programa de Ingeniería Agroindustrial mandó al carajo a Carlos Antonio Rivera por su mediocridad administrativa y la burocracia inútil creada.
Jancen Mahecha, desde un supuesto exilio, considera que la candidatura a la rectoría de Germán Rubio “…es un descaro y una vergüenza para la institución” y le destapa nepotismo, tráfico de influencias, contratación sin el cumplimiento de requisitos legales, persecución laboral y su incondicional complicidad con las administraciones de Ramón Rivera y Héctor Villarraga.
Mientras se esperaba la excomunión de Papacho por parte del procurador por haber autorizado el perdón a las que han abortado, se escucharon voladores y papayeras por la remoción del vicerrector académico David Benítez y del director de investigaciones Humberto Bustos.
Los que creyeron que se iniciaba la limpieza perdieron la sonrisa cuando recordando a Samper apareció el importado al Tolima por Foliquillo con el …aquí estoy y aquí me quedo… así gotereando en la trastienda en donde escuchó la renuncia del Presidente de Guatemala, por pecados más leves que los de Samper –dizque sin vergüenza presidente de Unasur- cuando negoció su absolución con la deshonrosa comisión de absoluciones.
No han faltado los que dicen que al rector le pasó lo que a Petro con el procurador. Fue su principal promotor para que llegara a ejercer su cargo de mano de la Biblia y la camándula y a la hora de verdad le salió falseto. La lista de falsetos es larga y la comunidad universitaria está pasando la cuenta. Ya está en cámara ardiente y a fuego lento el rabo de paja de Germán Rubio, a quien no le encuentran méritos morales ni intelectuales para ser candidato a la rectoría.
Un fósforo encendido que le cae es lo de su hijo bachiller nombrado supernumerario que con dos semestres pasó a planta como auxiliar administrativo.
Ivonne Palma, su cuñada, ingresó como supernumerario y en algo así como dos años aparece en nómina como profesional ejecutiva con grado 17, con incremento salarial superior al 100%. Pero el fosforito que muestra el rabo a color es la destitución de una funcionaria con ocho meses de embarazo que la justicia obligó a reintegrar para ser echada nuevamente al cumplir la licencia de maternidad. Muy buen familiar, así produzca pánico entre quienes conocen antecedentes.
La rebequera su récord en el Idead con persecución y otras carajaditas como los contratos por $70.000.000 para registros certificados que no fueron ofertados y el vencimiento de registros calificados de cinco programas.
Ese es el que necesitamos en Villarrestrepo para redondear el negocio de las misas de sanación, dijo algún curioso. Ahora que no está Don Camilo Londoño le podemos meter lo que le hace falta: trago y putas.
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