PUBLICIDAD
Si tiene una mascota, es posible que alguna vez haya tenido que cambiar su alimentación por diferentes motivos: un cambio en su etapa de vida, una necesidad especial, una preferencia personal o una falta de disponibilidad del producto habitual. Sin embargo, cambiar la alimentación de su mascota no es algo que se deba hacer de forma brusca, ya que podría causarle problemas digestivos o rechazo al nuevo alimento. Por eso, le ofrecemos una guía para hacer el cambio de forma gradual y segura.
Lo primero que debe tener en cuenta es que cada mascota tiene unas necesidades nutricionales específicas según su edad, tamaño, raza y nivel de actividad. Por ejemplo, un cachorro necesita un alimento rico en proteínas y energía para su crecimiento, mientras que un adulto necesita un alimento equilibrado que le ayude a mantener su peso y su salud. Así mismo, un animal esterilizado, con sobrepeso o con algún problema de salud puede requerir un alimento especializado que le ayude a controlar su condición.
Por lo tanto, antes de cambiar la alimentación de su mascota, consulte con su veterinario cuál es el alimento más adecuado para ella y siga las indicaciones del envase sobre la cantidad diaria recomendada según su peso y edad.
A continuación, expertos le cuentan cómo cambiar la alimentación de su mascota sin causarle daño.
Paso a paso
El veterinario Juan Reyes indica que una vez que haya elegido el nuevo alimento, debe introducirlo poco a poco en la dieta de su mascota, mezclándolo con el alimento anterior en diferentes proporciones.
El proceso puede durar entre 7 y 10 días, dependiendo de la sensibilidad de su mascota y de cómo acepte el cambio.
Un ejemplo de cómo hacer el cambio sería el siguiente:
25 % del nuevo alimento y 75 % del anterior, el día 1 y 2. 50 % del nuevo alimento y 50 % del anterior el día 3 y 4. 75 % del nuevo alimento y 25 % del anterior, el día 5 y 6, y un 100 % del nuevo alimento en el día 7.
Durante el cambio, observe el comportamiento y las heces de su mascota para ver si tolera bien el nuevo alimento. Si nota algún signo de malestar, como diarrea, vómitos o falta de apetito, reduzca la cantidad del nuevo alimento o alargue el periodo de transición hasta que se adapte. Si los síntomas persisten o son graves, consulte con su veterinario.
Cambiar poco a poco
Según Laura Castro, veterinaria de Laika, es importante hacer una transición gradual cuando se cambia la comida de los animales domésticos, pues si se hace de forma brusca puede causar una alteración del sistema digestivo que se manifiesta con síntomas como diarrea o vómito que afectan su bienestar.
Asimismo, la veterinaria indica que es esencial considerar que los perros y los gatos requieren alimentos distintos según su edad y su tamaño. Y que, entre las ventajas de escoger un buen producto para los animales domésticos está la mejor absorción del cuerpo, la menor cantidad que se necesita y la reducción notable de las heces durante el día.
MÁS NOTICIAS
Un rugido que aún resuena en el ciclismo colombiano
“Vamos paso a paso” El equipo pijao evita hablar de milagros, pero asegura ser un creyente
"Un contrato enorme" Messi ya tiene nuevo y polémico equipo: le ofrecieron exorbitante suma
Comentarios