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El suroccidente de Bogotá vivió una grave emergencia cuando un incendio devastó la localidad de Bosa, afectando a 35 viviendas y dejando a decenas de familias en una situación de incertidumbre. La mayoría de los damnificados aseguran haber perdido todo en el siniestro, lo que agrava aún más su situación mientras esperan el apoyo de las autoridades distritales para poder reconstruir sus vidas.
Afortunadamente, el incendio no dejó personas heridas, aunque la tragedia también involucró a animales de compañía. El Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal (IDPYBA) atendió rápidamente la emergencia y se desplazó al lugar para asistir a los animales que pudieran haber resultado afectados. Según el reporte oficial, tres perros fueron encontrados con afectaciones, pero tras ser evaluados clínicamente, los expertos informaron que ninguno de los casos resultó grave.
"Encontramos tres caninos que fueron afectados y los cuales fueron evaluados clínicamente encontrándose estables, sin ninguna secreción ni anomalías respiratorias", indicó el instituto.
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Además de brindar atención veterinaria, desde el IDPYBA aprovecharon la ocasión para hacer un llamado a la comunidad sobre los riesgos que representa la quema de pólvora durante las festividades decembrinas. La institución recordó que el uso de estos artefactos no solo puede generar incendios, como ocurrió en el barrio San Bernardino de Bosa, sino también causar severos problemas de salud en los animales, como heridas, quemaduras y trastornos de ansiedad.
Las autoridades continúan monitoreando la situación, y se espera que el apoyo institucional para las familias afectadas sea prioritario en los próximos días, mientras la comunidad y las entidades se movilizan para evitar futuros desastres durante esta temporada.
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