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La muerte del niño José Antonio Campo Carpio, de 2 años, ha causado conmoción en el sur de Bolívar y toda la región.
El menor, natural en el municipio de Morales, fue hallado muerto el pasado 6 de diciembre en un brazo del Río Magdalena que baña a la población de Regidor.
Al principio se habló de una caída por accidente al afluente que pasa cerca a su casa, en la mañana del 5 de diciembre, pero luego se comentó sobre un posible rapto y asesinato.
Medios de comunicación de esa zona del departamento contaron que en el reporte forense del niño hay detalles que hacen dudar de la muerte por inmersión. “Tiene dos fracturas en el tabique, una en el tórax y no le encontraron agua en los pulmones ni se le inflamó el abdomen por acumulación de gases o líquidos”.
Recordemos que un menor que estaba con la víctima dijo que un hombre se le acercó a José, lo subió en una moto y se lo llevó con rumbo desconocido.
Tras esta información, la familia solicitó a las autoridades investigar y dar con el responsable es así como, al parecer, las autoridades ofrecieron 20 millones de pesos de recompensa por quien entregue información del culpable.
John Jairo Campo Payares, papá del menor y pastor de una iglesia cristiana del municipio, pide a las autoridades que investiguen qué ocurrió con el menor. El hombre cree que fue raptado, asesinado y luego intentaron desaparecer el cuerpo lanzándolo al río.
Leonelis Carpio Morales, madre de José, contó que ese lunes 5 de diciembre envió al pequeño, junto con su hermano mayor, para que hicieran un mandado, pero el hermano llegó solo.
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