Fue en horas de la mañana, que unos 800 estudiantes y los profesores del Colegio Nacional San Luis Gonzaga, ubicado Chinácota, en Norte de Santander., se dispusieron para recibir la señal de la cruz en la frente por parte de un sacerdote. 

Según contó un padre de familia, a su hija le colocaron la señal en la frente y en cuestión de minutos le empezó a picar, luego otros compañeros se quejaron de que sentían como una quemadura y fue ahí cuando de inmediato se los llevaron a revisarlos y encontraron que estaban con quemadura.

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“A algunos no les alcanzó a hacer nada porque se la quitaron de inmediato y a otros ni alcanzaron a ponérsela. Los docentes dieron aviso de inmediato a Salud Pública y también llegaron a ponerse al frente de la situación”, contó el padre de familia.

La Opinión conoció que de los 800 niños la mayoría tuvo una mala reacción ante la puesta de la sustancia en la frente, sin embargo, fueron 25 quienes resultaron en urgencias del hospital San Juan de Dios y al menos 8 fueron remitidos con un médico especialista.

Entre tanto, la oficina de Salud Pública de Chinácota está al tanto de la situación, así como las directivas de la institución.

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José Gregorio Bautista Rico, rector del colegio, manifestó a La Opinión que ya remitió una carta a la Arquidiócesis de Pamplona en la que pide explicaciones para dar con las razones que pudieron desencadenar este hecho insólito.

Se espera que la Arquidiócesis de Pamplona se pronuncie ante lo ocurrido.

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