Una habitante de la vereda El Juncal, ubicada en el municipio de Palermo-Huila, compartió a través de sus redes sociales una experiencia dolorosa que vivió recientemente después de recibir el cuerpo de su hijo para darle cristiana sepultura.

El 28 de noviembre pasado, encontraron el cuerpo sin vida de Nelson José Cuauro, un hombre venezolano dedicado al reciclaje, flotando en la laguna de El Juncal. Al principio, se supuso que podría tratarse de un homicidio, ya que algunas personas que se acercaron al cuerpo señalaron una posible cortada en el cuello, como si hubiera sido degollado.

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Las autoridades llevaron a cabo los actos urgentes y comenzaron una investigación conjunta con la Fiscalía para esclarecer las circunstancias y las causas de su fallecimiento.

La tragedia continuó cuando la madre recibió a su hijo para darle una despedida acorde con las tradiciones católicas. Después de intentar contactar al sacerdote de El Juncal para programar una misa en memoria de su hijo, la madre y algunos familiares fueron informados de que el sacerdote no podía realizar la misa debido a su apretada agenda. Según la madre, el cura les dijo: "Entiérrenlo así, después le hago la misa".

Ante esta negativa, la madre, junto con algunos allegados, improvisó un entierro. Recibieron un poco de agua bendita que un vecino les regaló y rezaron un rosario para despedirse de su ser querido.