Durante el fin de semana pasado de abril, un patrullero en curso de ascenso en la Policía Nacional, quien se encontraba realizando un curso en la Escuela Gonzalo Jiménez de Quesada, denunció un perturbador incidente de abuso sexual presuntamente perpetrado por uno de sus superiores. Este desafortunado suceso tuvo lugar en Sibaté, Cundinamarca.

Según el testimonio del patrullero, la noche tomó un rumbo inesperado después de salir con un compañero y dirigirse a un local en el municipio para pasar tiempo juntos. En su camino de regreso al barrio Santa Isabel, fueron abordados por un grupo de superintendentes que también están realizando estudios en la misma escuela. El patrullero decidió acompañar a los superiores y continuar la velada en su compañía, lo que derivó en el consumo de bebidas alcohólicas.

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Al parecer, uno o varios de los superiores acompañaron al patrullero hasta su hogar con la intención de que descansara. Sin embargo, según las investigaciones en curso, fue en ese momento cuando ocurrió el presunto abuso sexual.

La denuncia fue interpuesta días después, una vez que la esposa del patrullero llegó de visita a su hogar. Posteriormente, fue evaluado por el equipo de sanidad de la Escuela Gonzalo Jiménez de Quesada y trasladado al Hospital Central de la Policía en Bogotá para una evaluación más detallada.

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La Inspección General de la Policía ha iniciado una investigación disciplinaria para esclarecer los hechos y determinar las responsabilidades pertinentes.

La Policía Nacional, anunció la apertura de esta investigación disciplinaria y aseguró su total colaboración con la Fiscalía General de la Nación en rdte proceso.