El saludo por lo general es la primera muestra de cortesía que se le ofrece a otra persona. Es una situación cotidiana y sencilla pero que encierra un singular valor para quien lo recibe y tanto más para quienes son ignorados.
Seguramente usted se sentirá mejor consigo mismo y más satisfecho con sus realizaciones profesionales y personales si advierte que sus conceptos son escuchados, que reconocen sus fortalezas o que lo invitan a participar en proyectos, entre otros.
Si usted busca un socio para montar una empresa o ampliar la que tiene, con toda certeza se tomará su tiempo para analizar con detenimiento las diferentes opciones que tiene. Es seguro que pondrá en una balanza todo lo positivo que el prospecto puede aportar para el crecimiento del negocio y las debilidades que considera afectarían la buena marcha y el éxito del mismo.
Con esto no quiero decir que se dicte la cátedra de cívica para los niños y jóvenes, a lo que invito es a que hagamos conciencia de la importancia de revisar nuestros comportamientos hacía las demás personas y con el entorno en que vivimos y que tomemos la decisión de modificar aquellos hábitos negativos que impiden ser mejores personas y mejores ciudadanos.
Toda persona o empresa espera lealtad de su familia, amigos, competencia y clientes. A nadie le gusta ser traicionado, el saber que un amigo habló mal de nosotros o contó algo que le había confiado en secreto hace pasar un mal rato.
'En la mesa y en el juego se conoce al caballero' y, por supuesto, a la dama. Es un dicho popular muy antiguo. Con él se quiere significar que los modales de una persona en la mesa dicen mucho de ella y de sus valores.