El coordinador ponente de la Ley Estatutaria de la Justicia Especial de Paz, representante a la Cámara, Hernán Penagos, urgió ayer a la plenaria de la Cámara de Representantes para que sea votado todo el articulado, debido a que el tiempo apremia y se deberá dar especial atención a la conciliación de la misma con el Senado.

El proyecto se tramita bajo la figura del ‘fast track’, del que se vencerá su plazo el próximo jueves, momento en que ya deberá haber sido aprobada y conciliada la JEP.

“Esperamos votar hoy (ayer) para que entre martes y miércoles conciliemos el jueves”, dijo Penagos, quien explicó que aún está por discutirse en la plenaria de la Corporación una norma relacionada con las inhabilidades a los magistrados, en la que se plantea que los mismos puedan ser recusados por cualquier ciudadano, si consideran que han actuado de manera improcedente.

Otro artículo que aún tiene expectativa es el relacionado con los delitos sexuales contra menores de edad, tema que según el ponente no se cederá.

El sector de los que no votarán

Por otro lado, un grupo de siete representantes conservadores informó que no votará el resto del articulado de la JEP porque, en su concepto, aún es distante para beneficiar a las víctimas.

Ese grupo está integrado por los representantes David Barguil, Orlando Clavijo, Inés López, Jaime Losada, Germán Blanco, Ape Cuello y Luis Horacio Gallón, quienes señalaron que “el texto de la ponencia no cumple con las expectativas de verdad, justicia, reparación a las víctimas y no repetición de delitos por los exguerrilleros”.

Indican, además, que no comparten participación política de los exguerrilleros sin que primero hayan pasado por la Justicia Transicional; solicitan claridad en relación con los beneficios que perderán los exguerrilleros que incumplan sus compromisos, no cuenten toda la verdad ni reparen a sus víctimas y que rechazan que el Gobierno haya eliminado el régimen de inhabilidades a los magistrados.

Hundir reforma política

El movimiento político Farc pidió ayer al Congreso de la República que frene el trámite del acto legislativo de la Reforma Política, pues tal como llegó a su último debate, en nada se parece a lo que fue convenido en el punto Dos de participación en política del acuerdo de paz.

El proyecto se empezó a discutir ayer en la plenaria del Senado, en su cuarto y último debate, esto dentro del mecanismo legislativo especial del ‘fast track’, que terminará el próximo jueves, si no es aprobado y conciliado el articulado antes de esa fecha se hundirá.

En su declaración, la organización política indicó que “la clase política tradicional que ha usufructuado hasta ahora las reglas del juego electoral, solo ha permitido modificarlas pero para su propio beneficio, dando la espalda a las amplias mayorías que exigen apertura democrática.

“Pedimos que se detenga este embeleco de Reforma Política: que el acuerdo de paz no sea utilizado para agudizar la ausencia de garantías democráticas y el ventajismo electoral de las grandes clientelas, y que desde ya se retome el debate de las verdaderas reformas institucionales estructurales por las que clama la ciudadanía, para volver a creer en este sistema político”.

Dato

Varias voces se han levantado en contra de la reforma política y electoral que se debate en el Congreso.