La preferencia de los consumidores de ahora es adquirir aquellos productos que han sido realizados por una empresa que tenga implementadas políticas de Responsabilidad Social y generen una sostenibilidad a futuro. 

Aquellos anuncios que vemos diariamente en los medios masivos de comunicación, donde se publicita un gran número de productos y servicios que  prometen beneficios y bondades que logran captar nuestra atención, inciden en los estilos de vida y los patrones de consumo de una sociedad. Sin embargo, la tendencia del consumidor de ahora es tener una posición mucho más crítica que le permite detectar cualquier engaño que pudiera llevar a tomar una mala decisión de consumo.

Es decir, el consumidor es más exigente y por ser uno de los actores principales de la economía es quién finalmente castiga o acepta lo que se ofrece en el mercado y muchas veces influenciados por las actividades que las empresas desarrollan para mejorar las condiciones sociales y ambientales determinan su decisión de compra. 

Pero, una acción de consumo responsable no es sólo quedarnos con la buena imagen que tenemos de una empresa o marca sino es preguntarnos si lo que vamos a comprar lo necesitamos o no y  además concientizarnos que al comprar el producto o servicio estamos contribuyendo de forma indirecta en todos los procesos que lo hicieron posible, ya que estos tienen implicaciones de carácter económico, social y medioambiental. 

Es hora que las empresas, al igual que los consumidores y demás actores sociales, se sumen a aportar un cambio en la economía y del mundo de una forma directa. Las empresas socialmente responsables son conscientes de esta nueva tendencia y algunas de sus estrategias  están en promover en los clientes y consumidores  prácticas de Responsabilidad Social, velar porque su publicidad sea totalmente transparente e investigar sobre la calidad de sus servicios y productos. Por esto las empresas con mayor responsabilidad social van a ser quienes se mantengan sostenibles en un futuro que no está muy lejano. 

Por otro lado, para que se genere un consumo responsable, los consumidores deben acceder a información y conocer mecanismos de participación que les permitan ejercer su responsabilidad individual y colectiva en las compras. En Colombia la ley 1480, el nuevo Estatuto del Consumidor, busca que los ciudadanos tengan una adecuada educación que les permita tomar elecciones de acuerdo con sus intereses o conocer sus derechos frente a las garantías de sus productos o servicios. 

Es importante tener pleno conocimiento de esta norma y para ello la Superintendencia de Industria y Comercio como ente encargado de velar por los derechos del consumidor ha establecido ciertos mecanismos de comunicación con el fin  de garantizar el entendimiento de la misma.  

Tener un consumo consciente y responsable, que permita crear actividades satisfactorias para el medio ambiente y la sociedad, es la forma como podemos hacer parte de las decisiones frente al mercado. Lo importante es entender que no es un tema de moda, sino que realmente lo que estamos haciendo es cambiar el mundo donde la inequidad social y el uso despilfarrado de los recursos naturales han llegado a su límite. 

Fuentes:
Ley 1480 Estatuto del consumidor

POR: MARCELA ROMERO ZARTA
Asesora Responsabilidad Social 
Corporación Fenalco Solidario