Son tantos cuestionamientos, reflexiones, análisis y posiciones las que se han expuesto sobre este tema que pareciera que ya “todo esta escrito”. Pero no, no es así, muy por el contrario, las páginas de esta historia están apenas por escribirse. Lo que hasta ahora ha sucedido es el prólogo y la introducción, con dedicatoria de la empresa a los tolimenses: “Nuestro negocio es la gente y la gente es nuestro negocio”. 

Hoy debemos referirnos a este proyecto con nombre y apellido: “Proyecto minero e industrial La Colosa”, con delimitación geográfica definida: Municipios de Cajamarca, Ibagué y Piedras, y con unos alcances más ajustados a la realidad que siempre se nos ha ocultado con “verdades a medias” expuestas por los diferentes voceros, representantes y defensores de la Compañía, quienes al unísono vociferan que esta “Es una oportunidad de oro para el Tolima”.

La semana que pasó la Multinacional presentó por escrito ante el Concejo Municipal de Ibagué lo que denomina: “Proyección general minera e industrial del proyecto La Colosa en el municipio de Ibagué”. Esto con un objetivo claro: que las áreas ocupadas por el proyecto en el Municipio sean incorporadas a las nuevas normas de desarrollo y ordenamiento del uso del suelo. Es decir, sean tenidas en cuenta en la revisión y ajuste del POT (Plan de Ordenamiento Territorial) de Ibagué, próximo a debatirse en la Corporación. 

Pese a que el proyecto se encuentra en la fase de prefactibilidad, y que, según lo informa la Compañía, se realizará un “análisis riguroso de alternativas, las características del proyecto”, el modelo de explotación y la infraestructura requerida esta más que definida, y desde hace ya varios años, pero solo ahora se acepta lo que antes se ocultaba, con el sofisma de que se realizarían estudios y análisis técnicos, económicos, sociales y ambientales, antes de llegar a determinar si “La Colosa”, sería una mina de oro a cielo abierto o no. Nos mintieron, y ahora esas mentiras dichas a través de verdades a medias, muestran realmente la envergadura y magnitud de este proyecto minero–industrial. 

Respecto al Municipio de Ibagué, al cual me referiré exclusivamente en esta columna con el ánimo de llamar la atención de mis coterráneos y habitantes de la capital musical de Colombia, se pretende ubicar, en su zona rural, 197 hectáreas para ser más exactos, la mayor parte del corredor de transporte de mineral, el área de molienda, la planta de procesamiento de oro y parte de la tubería de transporte de relaves. Resalto, esto no lo dice deliberadamente quien escribe estas líneas, se encuentra expresamente plasmado en el documento radicado por AGA en el Concejo de Ibagué. 

La infraestructura que pretenden desarrollar y que, según la multinacional, es necesaria para el procesamiento del mineral proveniente de Cajamarca, van desde Oficinas, Casa de Cambio, Casino, Taller de mantenimiento, Unidad de salvamento, Policlínico, Bodega, Almacenamiento de equipos, hasta Planta de agua potable, Laboratorio, Área industrial, Punto de transferencia, Área del corredor (90 por ciento del la cual estaría en túneles) y Área para ductos. 
Con base a ello presentan una “Propuesta al uso del suelo en el municipio de Ibagué”, para que esas 197 hectáreas de suelo rural sean incluidas en el POT como área destinada a uso industrial requerido por el Proyecto La Colosa. (Continúa…)