Ayer se realizaron las elecciones cafeteras en todo el país, estas convocaron a miles de caficultores interesados en fortalecer institucionalmente a su sector. Estas se han convertido en un instrumento para fortalecer la democracia en la Federación de Cafeteros en Colombia ya que la representatividad y cobertura que alcanza es alta.

Estas elecciones en particular fueron muy importantes ya que la antecedieron, no hace muchos meses atrás, paros y manifestaciones populares de cientos de caficultores que exigían a la Federación y al Gobierno mayor atención y apoyo durante la crisis del café. Inclusive, las directivas nacionales estuvieron a punto de ser removidas de sus cargos.

Ayer se eligieron los miembros principales y suplentes de los comités municipales y departamentales, quienes serán delegados ante el Congreso Nacional Cafetero, la máxima autoridad del gremio. Uno de los logros de estas elecciones fue la participación de algunos de los dirigentes de las pasadas manifestaciones y marchas, de la dignidad cafetera.

Para el caso del Tolima, desde el nivel nacional se advirtió que este departamento, junto con el Huila, es uno de los que mayor peso tienen, ya que aquí podían participar 50 mil 671 cultivadores de 52 mil 250, lo que convocó a la inscripción de mil 980 candidatos en 165 listas de aspirantes a comités municipales. Las cifras se resumen en seis seccionales (Ibagué, Villarrica, Planadas, Fresno, Chaparral y Líbano), 38 municipios productores, 60 mil 700 familias cafeteras, 26 comités municipales con 312 representantes y 12 delegados ante el Congreso nacional.

La importancia del café en nuestro departamento es significativa, no solo porque este cultivo se encuentra en la mayoría de los municipios del Tolima sino, además, porque es uno de los dos productos, junto con el petróleo, que se exporta desde el departamento. Además, el cultivo, la producción y la comercialización de café especial está llamado a ser la apuesta productiva más importante en la región. Si se busca una apuesta productiva que una a los tolimenses es el café.

La Federación Nacional de Cafeteros, al igual que la Misión de Observación Electoral, entregaron un balance positivo de las jornadas y un reporte de normalidad durante las elecciones.

Los retos sobrevinientes a las elecciones y a la conformación de los nuevos comités son muy importantes, entre ellos figuran vincular a aquellos caficultores que aún se encuentran por fuera del esquema de la Federación, alcanzar mayores niveles de calidad y de gestión para la agroindustria, innovar procesos para disminuir costos de producción, fortalecer canales de comercialización, entre muchos otros más. El proceso que se está adelantando por tener una marca de origen para el café tolimense muy seguramente se verá concretado ayudando a posicionar el producto de esta región en muchos mercados internacionales.

Finalmente, es importante reconocer el buen trabajo, y felicitar a todos aquellos cafeteros y dirigentes gremiales que participaron en las pasadas elecciones, y, obviamente, es fundamental desearles el mayor de los éxitos en el desarrollo de la agenda cafetera durante los próximos cuatro años.