Acabó la vigencia del decreto que expidió la Alcaldía imponiendo la restricción del parrillero hombre en moto.

Hasta el cierre de esta edición, el Municipio no había informado sobre ningún acto administrativo que reviviera la norma, por lo cual la misma no tendría aplicación, por lo menos, hasta que la Alcaldía decida reimponerla.

Carlos Gómez, director de Justicia y secretario de Gobierno encargado, en la mañana de ayer manifestó que revisarán la imposición de un nuevo decreto.

Para hacerlo, tendrá que ser citado un Consejo de Seguridad, al tratarse de una decisión basada en el orden público, para luego proyectar el acto administrativo.

Es decir, podrían ser varios los días en que los parrilleros hombre podrán darse 'la palomita' en motocicleta, pues el decreto tendría que cumplir además con un periodo de difusión.

La última vez, la Secretaría de Gobierno basó su decisión de reimponer la restricción en el Artículo 2° de la Constitución, que habla sobre la obligación de las autoridades de proteger los bienes, vida, honra y creencias de la ciudadanía.

Citó además el Artículo 315, numeral Dos, que le atribuye poder al Alcalde para conservar el orden público.

En el documento no incluyó en ese momento ninguna estadística concreta que demostrara la incidencia positiva en la seguridad de la ciudad tal decisión.

Otro aspecto cuestionado es que esta medida ha perdido su poder  persuasivo, pues la Policía de Tránsito no estaría controlando de la manera debida su cumplimiento.

Se ven continuamente parrilleros hombre circulando por el centro de la ciudad y se escuchan denuncias al respecto regularmente en los barrios.

Por su parte, los motociclistas se quejan de la presunta persecución que sienten de las autoridades y hoy, la concejala Erika Ramos, del partido Mira, convocó a una marcha a las 7:30 de la mañana,   rechazando la prohibición del parrillero.