En las últimas semanas, se conoció un insólito caso del asesinato de una mujer en manos de su amiga, al parecer, para quedarse con su herencia. Lo llamativo, es que habría usado unas gotas para los ojos para atentar contra su vida.

Se trata de Jessy R. Kurczewski, de 39 años de edad, a quien declararon culpable en el estado Wisconsin, Estados Unidos por el homicidio contra Lynn Hernan.

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Las autoridades locales han informado que la mujer llamó a reportar que su amiga no respiraba, incluso llegó a insinuar que tenía intenciones suicidas, puesto que la hallaron sin signos vitales, rodeada de varios medicamentos.

El hecho ocurrido en 2018, ahora se reabrió el caso por petición de ciertos amigos y familiares que vieron la situación muy extraña y sospechosa. Así las cosas, en un examen de laboratorio se detectó que la fallecida tenía una "cantidad letal en la sangre de Tetrahidrozolina", el componente principal de las gotas oftalmológicas.

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De acuerdo a la implicada, su amiga tenía una obsesión con las gotas para los ojos, así que no vio ningún problema en darle una botella de agua entera que contenía dicho fármaco. Ella pasó mucho tiempo bebiéndola.

No obstante, se logró evidenciar que Jessy R. Kurczewski figuraba como una de las herederas y habría gastado más de 300 mil dólares, dinero de la mujer asesinada. Fue así como las autoridades siguieron de cerca sus movimientos.

De acuerdo a un medio del lugar, la heredera estaría pasando por una fuerte crisis económica que la obligó a gastarse el dinero de Lynn.

Finalmente, se pudo establecer que la justicia concluyó que Jessy había asesinado a su amiga Lynn para cobrar el dinero de la herencia.