La historia de esta canina se ha vuelto viral en el mundo, pues, aunque se creía que no tendría esperanzas de una vida normal, la ciencia demostró que sí.

Las patas traseras de Ariel estaban parcialmente fusionadas, pareciéndose a la cola de una sirena, lo que le valió el apodo inspirado en el icónico personaje. Greenacres Rescue, una organización sin fines de lucro con sede en Haverfordwest, acogió a Ariel, organizó una cirugía para abordar sus problemas de salud y le proporcionó un hogar temporal.

El dedicado equipo de Greenacres Rescue compartió la buena noticia en Facebook, declarando: "Nuestra maravillosa y especial perrita spaniel ha sido dada de alta del Hospital de Referencia de Pequeños Animales Langford Vets de la Universidad de Bristol y está de vuelta en la comodidad de su maravilloso hogar de acogida". Acompañando la actualización había conmovedoras fotos de Ariel envuelta en una manta roja después de la cirugía.

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Según el grupo de rescate, Ariel se encuentra actualmente en la fase de recuperación y camina normalmente. Expresaron gratitud por el exitoso resultado del procedimiento, revelando que tiene algunas semanas de recuperación por delante.

"Ariel ahora necesita descansar durante los próximos 10 a 14 días para recuperarse", compartió el grupo. "Publicaremos actualizaciones durante ese tiempo".

Mikey Lawlor, fundador de Greenacres Rescue, proporcionó detalles sobre la operación de Ariel, diciendo: "Se sometió a dos procedimientos que duraron aproximadamente dos horas, pero ambos salieron bien". Lawlor habló con la Press Association del Reino Unido, compartiendo que Ariel estaba despierta, caminando, comiendo y bebiendo al día siguiente de la cirugía.