En la madrugada del sábado 4 de enero, un bus de la empresa Rápido Ochoa cayó a un río en la autopista Medellín-Bogotá, a la altura del municipio de San Luis, dejando un saldo de tres personas fallecidas y 39 heridos.

Las víctimas fatales fueron identificadas como Ilda Echavarría, de 57 años, oriunda de Chigorodó y residente en Apartadó; Juan Carlos Daza Soto, de 41 años, quien viajaba con su familia desde Bogotá a Medellín; y Geraldin Gómez Pavón, de 31 años.

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Según medios loclaes, Echavarría se encontraba acompañada por su esposo, quien sufrió heridas leves. Por su parte, Daza Soto iba junto a su esposa, Sandra Milena Cuervo, y su hija de siete meses, quienes sobrevivieron al accidente, aunque resultaron heridas. Según versiones entregadas a Noticias Caracol, Sandra logró rescatar a la menor tras la caída del bus, encontrándola entre las piedras en medio de la emergencia. Ambas fueron trasladadas a la clínica Somer de Rionegro, donde permanecen bajo observación médica.

Esta tragedia se suma al otro caso del bus que se precipitó por un abismo en Nariño y que dejó el saldo de 13 personas fallecidas, personas mutiladas y al menos 30 heridos.