En total ocho meses completa suspendido el suministro de agua de las quebradas Pontezuela, El Rincón y La Cristalina al sistema de acueducto alterno, construido para las mil 100 viviendas financiadas por el Gobierno nacional.

Lo anterior, a raíz de los derrumbes ocasionados en las bocatomas, ubicadas en las tres afluentes y la ruptura continua de algunos tramos en los 22 kilómetros de la línea de conducción, principalmente en la vereda Cataimita y la falla geológica El Salón.

La Veeduría Agua para Ibagué (Vapi) recuerda que la tubería en la falla El Salón fue instalada sobre un costado de la vía, pero debido a los continuos derrumbes, la banca ha ido desapareciendo y, por consiguiente, la línea de conducción quedó expuesta.

“La línea de conducción lleva ocho meses fuera de servicio y al presentarse un verano relativamente fuerte dejará a Boquerón y Multifamiliares El Tejar sometidos a un fuerte racionamiento de agua, no sin antes dejar en claro que estos dos mil usuarios vienen teniendo racionamientos continuos de agua desde hace muchos meses atrás (mil 100 usuarios en Multifamiliares el Tejar más 900 usuarios de Boquerón)”, precisa la Veeduría.

Es de recordar que la obra fue adjudicada por la administración anterior al consorcio Constrico, en un contrato que tuvo un incremento en su valor inicial del 87 por ciento, cuando el máximo aprobado por Ley es del 50 por ciento.

En total, la obra terminó por costar al Municipio tres mil 500 millones de pesos. Vapi ha venido denunciando la pésima ejecución de la obra y, según la misma, “al día de hoy no ha pasado absolutamente nada, nunca hicieron efectivas las pólizas, así como tampoco declararon la caducidad de este contrato, sencillamente esta plática se perdió y tenemos a dos mil familias padeciendo por racionamientos continuos de agua”.

El gerente del Ibal, José Alberto Girón, confirmó que “son caudales mínimos los que están llegando a la planta de tratamiento del acueducto de El Tejar”, debido a que la línea de conducción tiene muchas fracturas y rupturas.

Y dijo que “la obra desde el principio cuando yo la revisé como veedor junto Vapi, la encontramos en muy mal estado”.

El directivo explicó que a la fecha hay racionamientos por sectores en Boquerón y El Tejar, pero por la época de invierno no se siente.

El Ibal a través de convenio ejercer la operación de la planta de tratamiento.

Las obras fueron recibidas por el anterior gerente de Acuaboquerón, Juan Bautista, a pesar de las múltiples alertas generadas por la veeduría Agua para Ibagué con respecto a la calidad de las obras.

El vocero de la asociación del acueducto de Cataimita, Walter Martínez, indicó que Acuaboquerón ha invertido cerca de 25 millones de pesos para el arreglo de los tubos, no obstante continúan las fugas.

El líder comunal reiteró que se les hace extraño que de los entes de control ninguno se ha pronunciado con respecto a la ejecución del contrato.

El Municipio aún adeuda 198 millones de pesos al contratista por la ejecución de los trabajos.

El secretario de Desarrollo Rural, César Picón, indicó el pasado 26 de julio que se requeriría al interventor y al supervisor del contrato para que se pronunciaran con respecto a las falencias planteadas en la obra.

De acuerdo con el funcionario, “el contrato no se había liquidado, por lo que no están extintas las funciones de la interventoría y la supervisión”.

Según añadió Picón, “una vez ellos reportaran información veraz, cierta y concreta”, la Administración tomaría una decisión acerca de si finalmente se cobrarían las pólizas respectivas o se harían las reparaciones a las que haya lugar en el sistema de acueducto. A la fecha, la Administración no ha dado respuesta.

A control político

El concejal de La U Pedro Mora tiene citados para el próximo miércoles al Secretario de Desarrollo Rural, al Contralor y al Personero, para que especifiquen qué acciones han tomado con respecto al contrato y las obras.

Según Mora, a pesar de que la administración anterior “dejó unos entuertos” sin resolver, también lo es que han pasado dos años del actual gobierno y no se ha resuelto qué va a pasar con la millonaria inversión que hizo el Municipio.

“Ya han transcurrido dos años, que es un tiempo suficiente para tomar decisiones, esa problemática debe avanzar y ser resuelta”, dijo Mora.

Al cabildante le preocupa que aún no se hayan ejecutado las pólizas de garantía.

Según el funcionario, las familias de Multifamiliares El Tejar comparten el agua que es tomada por Boquerón de la quebrada El Tejar, que podría llegar a colapsar y generar una problemática social de grandes dimensiones.

Recordó que en contra del Municipio hay una acción popular fallada que obliga a mantener en óptimas condiciones la vía que conduce de Boquerón a las veredas Cataimita, El Ingenio y El Triunfo, así como el sector Los Túneles, por ser la única vía de escape por erupción al volcán Cerro Machín.