Elizabeth Pinilla, madre de familia, denunció que “el año pasado los niños retomaron clases en noviembre y el colegio se encontraba en mal estado. Vine a una entrega de boletines y me di cuenta que habían múltiples goteras en el aula. Además, en uno de los salones se había desplomado el techo”. 

Cabe aclarar que la institución recibe a 250 alumnos en las dos jornadas escolares. Según docentes de la escuela, los baños de la institución se encuentran fuera de servicio porque se encuentran tapados por la cantidad de sedimento que trae el agua. A su vez, los docentes compartieron que ante los diversos infortunios, algunas veces deben suspender clases para evitar cualquier inconveniente dentro del plantel educativo. 

Por otra parte, también se estableció que la sede escolar no cuenta con personal de aseo ni enfermería, asuntos que fueron requeridos durante una protesta llevada a cabo por los estudiantes de la sede principal el pasado 5 de abril en la vía principal de Boquerón.

Jaime Amaya, rector de la institución, indicó que tras una reunión con el secretario de Educación, se pactó la ejecución de acciones inmediatas y a largo plazo a través de un acta de compromiso. 

A su vez, refirió que “la filtración del techo debe afrontarlo el colegio con fondos propios. Se inició un trámite para reparar los techos y construir un drenaje. A nosotros a veces no nos alcanza el presupuesto para hacer estas labores, por lo que vamos a esperar recursos del Ministerio de Educación para adelantar el proceso este primer semestre del año”. 

Juan Manuel Rodríguez, secretario de Educación, dijo que el asunto de los aseadores ya se solucionó y que durante Semana Santa se trabajará para cubrir todas las necesidades de la institución. 

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