El barrio Ciudad de Quito de Soacha- Cundinamarca, se convirtió en el escenario de un atroz crimen. Los hechos ocurrieron en la noche del pasado 31 de octubre, en el marco de la celebración de Halloween. 

Como es habitual, para esta fecha los padres salen a las calles con sus hijos disfrazados con el fin de recolectar la mayor cantidad de dulces posible. La economía y el gran flujo de personas estuvieron disparadas por todo el país. 

Sin embargo, la actividad entre padre e hija que dejaría un recuerdo inolvidable, se convirtió en una completa pesadilla que seguramente dejó marcas muy fuertes en la menor.  Pues, el hombre fue abatido practicamente frente a su mirada. 

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La víctima de este hecho se movilizaba a pie con su pequeña por una concurrida calle del barrio en mención, cuando inesperadamente fue sorprendido por un hombre armado, quien sin mediar palabra le disparó en dos ocasiones sin importarle la presencia de la niña que no supera los 5 años. 

Otro hombre en motocicleta lo estaba esperando para emprender la huida. Por su parte, la comunidad aterrada y sin poder creerlo, hizo un llamado urgente a las autoridades, quienes se encargaron de gestionar los actos urgentes. 

La Fiscalía General de la Nación, tras un sólido trabajo investigativo, logró la judicialización de tres individuos: Nilson Stiguen Combariza, Luis Amador Escobar y Carlos Enrique Chirinos Crespo. Estos hombres son considerados presuntos responsables de la muerte de este ciudadano.

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La rápida actuación del CTI y la SIJIN de la Policía de Cundinamarca llevó a la identificación y captura de los presuntos implicados en este asesinato. Las autoridades realizaron diligencias de registro y allanamiento en dos residencias de Soacha, donde se incautaron una pistola neumática, 16 cartuchos, un teléfono celular y la motocicleta que aparentemente se usó en el crimen, la cual tenía reporte de robo y placas adulteradas.

En el marco de la judicialización, un fiscal de la Seccional Cundinamarca imputó cargos a los detenidos por su presunta participación en los hechos. Estos cargos incluyeron homicidio agravado, fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o accesorios, fabricación, tráfico y porte de armas y municiones de uso restringido, de uso privativo de las fuerzas armadas o explosivos, y falsedad marcaria. Los procesados no admitieron su culpabilidad y deberán cumplir medida de aseguramiento en un centro carcelario.