Nació en 1955, gracias a la gestión del sacerdote eudista Rafael García Herreros y era un programa de difusión de la fe católica que, además, hace parte de una obra social que ha entregado vivienda y educación a las comunidades más necesitadas.
Seis años después de estarse emitiendo el Minuto de Dios, el padre García Herreros creó el Banquete del Millón, un programa que invitaba a las personas y empresas a donar recursos para contribuir en la construcción del barrio El Minuto de Dios, que se fundó en Bogotá. Alrededor de esta obra también se fundaron una iglesia, un teatro, un centro de salud, un colegio, una universidad, con una agencia de empleo, un banco de donación de ropa y programas de adquisición y mejoramiento de vivienda.
El sacerdote Diego Jaramillo, actual presidente de la Corporación Minuto de Dios, continuó la labor del padre García Herreros, transmitiendo diariamente un mensaje de reflexión a los colombianos sobre la palabra de Dios y con el compromiso de sostener y engrandecer la obra social de su antecesor. El padre Camilo Beltrán, vicepresidente de la Corporación Minuto de Dios, dice con orgullo que el Minuto de Dios “está en la mente y el corazón de todos los colombianos”.
El Tolima es uno de los departamentos que recibe beneficios educativos, a través de la Corporación Universitaria Minuto de Dios (Uniminuto), que cuenta con sedes en Ibagué y Lérida. La institución ofrece programas de pregrado y posgrado en las modalidades presencial, a distancia y virtual, con la posibilidad para los estudiantes de acceder a créditos para el pago de su matrícula. Así mismo, en Ibagué funciona el Colegio Arboleda del Campestre Minuto de Dios.
De igual forma, Uniminuto lleva a cabo alianzas con entidades públicas y privadas para favorecer a poblaciones con necesidades de formación en habilidades específicas. Una de ellas es la que formalizó con Cormoda y la Gobernación del Tolima para la capacitación de personas en el área de confección, un sector productivo de gran dinamismo en la región.
De manera que el Minuto de Dios no solo es el programa televisivo más antiguo de Colombia, sino una iniciativa de desarrollo popular de gran alcance.
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