El pasado jueves 12 de octubre, falleció Luis Alfredo Garavito, violador y asesino de más de 200 niños de Colombia, Ecuador y Venezuela.

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‘La Bestia’, como era llamado, cumplía un compendio de condenas que sumaban 1.853 años, en la cárcel de Valledupar. Después de 12 días de su fallecimiento, el cadáver del homicida se convierte en un problema de salud pública para la ciudad, pues no ha sido reclamado por familiares o conocidos.

El cuerpo permanece en una nevera de Medicina Legal y debido a la descomposición, el sitio ya no garantiza una temperatura constante para su mantenimiento.

¿Por qué no se ha entregado el cuerpo?

Según indicó la Fiscalía seccional Cesar, la policía judicial de municipio donde nació Garavito, Génova, Quindío, está verificando el registro civil que entregó un familiar del fallecido, en específico, su sobrino.

“El sobrino de Garavito llegó a Valledupar el lunes feriado. Aportó el registro de civil de Luis Alfredo, al igual que el de su hermana Esther Garavito Cubillos, cédulas correspondientes. El documento no estaba muy claro, pero se podía evidenciar que era el registro civil de Garavito”, explicó Gabriel Alfonso Beltrán, abogado de Garavito a El Tiempo.

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A pesar de que la cremación estaba programada para el 18 de octubre, el allegado del hombre no logró obtener cenizas, por la demora en la documentación.

Cabe recordar que ‘la Bestia’ murió a causa de un cáncer ocular a los 66 años.