El país empezó el 2025 con un incremento en los precios de la gasolina y el ACPM, según anunció el gobierno nacional. Esto obedece a ajustes normativos y al aumento en la mezcla de biodiésel, que impacta directamente en el bolsillo de los consumidores.

Leer: Abuelitas bailan al ritmo de Karol G y conquistan las redes sociales

Según el Ministerio de Hacienda, el precio del diésel se fijó en $10.725 por galón a partir del 1 de enero. Este aumento se debe, en parte, a la disminución en la oferta de biocombustibles durante el segundo semestre de 2024.

En Colombia, las ciudades principales experimentaron incrementos en los precios de ambos combustibles. Mientras que Villavicencio registra el valor más alto por galón de gasolina, Pasto sigue siendo la ciudad más económica. Aquí los precios en algunas ciudades:

• Bogotá: 16.085 pesos.
• Medellín: 16.009 pesos.
• Cali: 16.097 pesos.
• Barranquilla: 15.732 pesos.
• Cartagena: 15.690 pesos.
• Montería: 15.940 pesos.
• Bucaramanga: 15.848 pesos.
• Villavicencio: 16.185 pesos.
• Pereira: 16.036 pesos.
• Manizales: 16.061 pesos.
• Ibagué: 16.005 pesos.
• Pasto: 13.773 pesos.
• Cúcuta: 14.091 pesos.

Con el fin de mitigar el impacto de estos incrementos en el bolsillo de los colombianos, el gobierno nacional decidió reducir el Ingreso al Productor del Combustible Fósil en $179. Sin embargo, este subsidio no será suficiente para compensar el alza total en los precios.

Los principales factores que contribuyeron a este aumento son:

Aumento en la mezcla de biodiésel: La obligatoriedad de mezclar un mayor porcentaje de biodiésel en el combustible incrementó los costos de producción.

Ajustes normativos: Los cambios en las regulaciones del sector energético también influyeron en el alza de los precios.

Dinámica del mercado internacional: Los precios del petróleo a nivel mundial también impactan en los costos de los combustibles en Colombia.

Leer: Grave accidente de bus, vehículo terminó encima de tractomula

Este incremento en los precios de la gasolina y el ACPM generará un mayor costo de vida para los colombianos y podría afectar diversos sectores de la economía, como el transporte y la producción.