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Este terrible suceso tuvo lugar en Reino Unido, cuando un menor de seis años empezó a presentar síntomas de vómito, y un dolor constante en sus piernas y brazos. En ocasiones, también se chocaba contra las paredes.
En un primer momento, los médicos que atendieron al niño diagnosticaron que se trataba de un virus. Sin embargo, fue su madre quien constantemente insistió en que sucedía algo más grave.
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"Seguían diciendo que era una infección viral y que lo llevaran a casa y le dieran medicamentos sin receta, pero tenía en la cabeza que tenía un tumor cerebral. Ya había visto los síntomas antes en mi trabajo como enfermera”, explicó la mamá.
Keily Ebbs presionó todo lo que pudo para que a su hijo le dieran la atención adecuada. Tras siete visitas al hospital, por fin los profesionales decidieron hacerle una tomografía computarizada que les permitió ver el tumor cerebral.
De inmediato Jett fue trasladado a otro hospital para extirpar la masa cerebral que recorría su columna. La intervención duró 10 horas y el nivel del procedimiento fue tan intenso, que hubo la necesidad de que la madre firmara su defunción.
Esta experiencia, que a palabras de la madre fue “extraña y desgarradora” no terminó ahí. Pues, el niño tuvo que someterse a otros 11 procedimientos, entre ellos a una craneotomía y a cirugías de derivación.
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Estas derivaciones implican colocar un tubo en el cerebro o la columna para drenar el líquido y aliviar la tensión. Sin embargo, esto implicó que Jett contrajera una infección que lo dejó en coma durante algunos días, y que su tumor se envolviera en su columna impidiéndole el movimiento en sus piernas.
A pesar de que aún no tienen un pronóstico claro, Ebbs dice que su hijo sigue lleno de valentía y positivismo, pues a pesar de este momento tan difícil, permanece muy sonriente. Para ella, mantener a Jett con vida ha sido un milagro.
De esta manera, le deja un mensaje a otros padres: "Empuja y empuja si crees que algo anda mal", en tono de motivación para que otros padres exijan respuestas cuando vean que algo no está bien.
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